El Papa advierte de los peligros que amenazan al futuro del hombre

ROMA, ITALIA.- El Papa Benedicto XVI advirtió de que la pobreza, la violencia, las discriminaciones y la degradación del medioambiente representan fuertes preocupaciones por lo que se refiere al futuro del hombre, según un mensaje publicado para la Jornada Misionera Mundial.

Benedicto XVI invitó también a reflexionar sobre "la urgencia" de anunciar el Evangelio en la época actual, según su mensaje para dicha Jornada, que se celebrará el 19 de octubre con el lema "siervos y apóstoles de Cristo Jesús".

El Papa repasó la situación del mundo y dijo que el panorama internacional, aunque por una parte presenta "perspectivas de prometedor desarrollo económico y social", por otra presenta "algunas fuertes preocupaciones por lo que se refiere al propio futuro del hombre".

En este sentido, Benedicto XVI se refirió a la violencia, que "en no pocos casos marca las relaciones entre los individuos y los pueblos", a la pobreza que "oprime a millones" de personas, a las discriminaciones.

El Papa también habló de progreso tecnológico, que cuándo no esta encaminado "a la dignidad y al bien del hombre" ni a un desarrollo solidario "pierde su potencialidad de factor de esperanza y corre el riego de agudizar desequilibrios e injusticias ya existentes".

De igual manera, evocó "la constate amenaza por cuanto se refiere a la relación hombre-medioambiente debido al uso indiscriminado de los recursos, con repercusiones en la misma salud física y metal del ser humano".

Ante este escenario, dijo el Papa, se siente "el peso de la inquietud" y el hombre se pregunta cuál será el futuro de la humanidad y de la Creación.

Benedicto XVI indicó que la repuesta viene a los creyentes del Evangelio, "es Cristo nuestro futuro" y "su Evangelio es comunicación que cambia la vida, da esperanza".

Por ello, "es un deber apremiante para todos anunciar a Cristo y su mensaje salvador", escribe el Papa en su mensaje.

Además, señaló que "mientas sigue siendo necesaria y urgente la primera evangelización en no pocas regiones del mundo, la escasez de clero y la falta de vocaciones afligen hoy a varias diócesis e institutos de la vida consagrada".

El Papa reiteró que, "aún en presencia de crecientes dificultades, el mandado de Cristo de evangelizar a toda la gente sigue siendo un prioridad".