Por César de AndaEn esta época se vale poner en marquesina “cerrado por balance”, adentrarse en sí mismo y reflexionar. ¿Cómo se podría concebir a la Navidad sin celebrar la afortunada presencia de las mujeres en nuestras vidas? Si ellas, son verdadera ancla y sostén de los núcleos familiares y por consecuencia de una comunidad. Su fuerza e influencia real se siente en la vida de las sociedades de todo el mundo en este cambio de calendario, que con agudeza inteligente se ve reflejada en iconos que surgen a la vista pública en el mundo, sin olvidar los miles y millones de mujeres que tienen sus nombres y sus faldas muy bien puestas conduciendo a sus “tribus” por el camino del anonimato silente y la formación de sociedad. La contundencia de su avance como líderes mundiales la explica con hechos Janet Yellen, nueva responsable de la Reserva Federal de los Estados Unidos de América, el banco central más poderoso del planeta. General Motors, compañía automotriz emblemática del capitalismo, nombra a Mary Barra como su CEO (Jefe Máxima). Primera mujer que encabeza una armadora de autos. Angela Merkel reconfirma su poderosísimo y genuino liderazgo mundial al ser de nueva cuenta electa canciller de Alemania. Park Geun Hye es la próxima presidente de Corea del Sur. La contienda electoral de Chile fue escenificada en segunda vuelta por las destacadas políticas, Evelyn Matthei y Michelle Bachelet, ésta última del Pacto Nueva Mayoría, que por segunda ocasión será presidenta de su país. Pequeño y grande sudamericano que demuestra otra vez ser una de las democracias más maduras y avanzadas de América Latina . Boton de muestra de la capacidad y liderazgo femenino sólo en 2013. Antes, el mundo contaba ya con Jefas de Estado en Liberia, la India, Argentina, Lituania, Costa Rica, Brasil, Kosovo, Malaui y San Marino. Amén de Christine Lagarde, primera mujer que asume la dirección gerencia del Fondo Monetario Internacional y antes como destacada abogada había sido la primera en haber encabezado al influyente despacho Baker & McKenzie. Cada vez es más normal que las compañías, organizaciones, instituciones multilaterales y naciones, sean dirigidas en la mayoría de los casos con éxito por valientes, atrevidas y congruentes mujeres que le están gritando al mundo que ahí vienen. Y no alcanzaría la edición entera de este diario para describir los nombres de mexicanas que están rompiendo los cánones e impactando la historia de la academia, la investigación, la empresa y la política, demostrando su altísima competitividad y responsabilidad. Nuestra historia está plagada de hermosas y talentosas damas que han determinado el rumbo y lo han cambiado. El presente, siente la implacable voz de niñas y mujeres que están moviendo a Mexico. El futuro, obliga que sean también la gran apuesta de México. No cabe duda que el “Manual de Carreño” y la educación recibida de nuestros padres, tienen toda la razón, porque; el “primero las damas”, jamás fallará. Y el dilema para mí, está resuelto. Definitivamente las gallinas fueron primero que los huevos.
