Corrían 58 minutos del partido entre Trinidad y Tobago y México, celebrado ayer en el Ashely Crawford de Puerto España, capital trinitaria, cuando Diego Reyes cazó un centro de Miguel Layún en un tiro de esquina y metió un frentazo que venció el lance del arquero rival Jean Michael Williams, para poner en ventaja al equipo mexicano por 0-1, ventaja que conservarían hasta el final del cotejo los pupilos de Juan Carlos Osorio para mantenerse en el liderato del Hexagonal de la Concacaf eliminatorio para el Mundial de futbol Rusia 2018, al llegar a 10 puntos de 12 posibles, esto es una gran cosecha y los tiene casi con un pie en Rusia, pues tienen en el mes de junio dos juegos seguidos en el Azteca ante los Estados Unidos y Honduras, que en caso de ganarlos prácticamente tendrían asegurado el boleto al Mundial ruso.Importante pues el resultado, y más porque se consiguió en calidad de visitante y con ausencias importantes debido a lesiones, como Rafael Márquez, Andrés Guardado, bien suplantados por Diego Reyes y Miguel Layún, y un trabajo excelente del equipo en general donde todos los que jugaron hicieron bien su labor, ante un tozudo equipo trinitario que quiso imponerse con base en su fortaleza física y velocidad, inclusive habían anotado primero con un cañonazo dentro del área de Jones, pero la jugada se anuló, pues el árbitro marcó un fuera de juego inexistente cruzado por su juez de línea, algo a tomar en cuenta para no quejarse cuando el perjudicado con una decisión arbitral resulte el equipo mexicano.Estupendo juego ofreció el joven atlista Luis Reyes, defendiendo bien y tocando con mucha intención cuanto balón tocó. Talavera casi no tuvo trabajo, pues la defensa se portó a la altura con Carlos Salcedo y sobre todo Néstor Araujo, que además daba una buena salida al equipo verde que ayer jugó de blanco. Con este triunfo en una cancha donde no se ganaba desde 2004, México es líder del Hexagonal con 10 unidades ganadas de 12 posibles, dejando a Costa Rica con siete en el segundo lugar; los ticos sacaron el 1-1 en San Pedro Sula ante Honduras, que no sabe lo que es ganar hasta el momento en el Hexagonal y cada vez complica más su situación.Para Juan Carlos Osorio queda la satisfacción del triunfo y saber que cuenta con jugadores que pueden responder cuando sean necesarios, como Luis y Diego Reyes, Orbelín Pineda y Carlos Vela, así como Raúl Alonso Jiménez y Jesús Gallardo. Sí, el equipo mexicano luce sólido y comprometido, metiendo alma, corazón y vida, más la pierna, y personalidad cuando las cosas se complican y hay que poner producto de gallina en el campo. Por lo pronto parece, como decía el buen amigo Nacho González, que nuevamente “llegó papá”.
