En mis dos colaboraciones anteriores me referí a como se celebra la Semana Santa en Guatemala y a los Centros de la Fe de los católicos en América Latina; en el hoy, en este artículo continuaré escribiendo de la tierra de los Chapines y la percepción que tuvieron los españoles de ella durante la época de la conquista y que constató con lo que realmente se vivió en esa época en el país centroamericano. En uno de sus escritos, Fray Toribio de Motolinia, queriendo explicar el significado de la palabra Guatemala dice: “Era Quauhtemallan árbol podrido, hediondo, que de sí echaba y corría materia y podre”. “Es dicción compuesta de dos vocablos: Quauhtli que quiere decir árbol, e Temalle materia ó podre”. Según él, los tiempos pasados cuando en Quauhtemallan reinaba la idolatría y los pecados, e no se conocían en ella ni se adoraban si no los demonios, no hay que dudar sino que era árbol hediondo, que de sí no daba sino fruto infernal. En ella los demonios eran llamados y honrados, allí Dios era ofendido y blasfemado, y la gloria que a Dios debía de dar, era dada a los ídolos y a los demonios”... ”Que en bajo de grandes árboles e montañas espesas y bosques eran llamados y adorados los demonios, y cometidos grandes y enormes pecados”. Después de escribir esa visión de pesadilla del Fraile, continuemos evocando el pasado histórico de este pueblo con cosas bellas y menos trágicas. Durante más de un mes. Entusiasmado recorrí por primera vez Guatemala; me deleité con sus variados paisajes, con su música y me asombraron sus tejidos y los bordados a tal grado que puedo decir que si usted en su vestuario, quiere mostrar al mundo el lujo de sus posesiones, si le gusta lucir verdaderas joyas personales, adquiera el producto hecho por estos tejedores habituales, de a conocer en su tierra las obras de arte que el indígena inició y terminó en su telar de cintura. El árbol que canta La mitología Maya describe su historia, a veces murmurando, otras ocasiones con tonos suaves o en forma ruidosa pero llenos siempre de armonía, los sonidos que produce el hormigo al golpearlo: el árbol que canta es el medio de esparcimiento de Guatemala, pueblo alegre y sonriente que encontró en la marimba la manera de expresar su acendrado amor a la música. Para algunos historiadores este instrumento musical data de tiempos legendarios, su origen lo fincan en Centroamérica, es Guatemala su cuna pues la marimba maya o de tecomates juntamente con el antiguo instrumento musical denominado “Tun” (cilindro de madera tocado con dos palitos con punta de caucho o hule) serían los ancestros que al irse perfeccionando con el tiempo se convirtieron en el actual arte de la ebanistería ya que al hacer las teclas de esa madera especial muy sonora convirtieron al árbol hormigo en la expresión de su sentimiento artístico. En la selva lacandona es donde existe el hormiguillo o árbol colorín como también se le llama al árbol hormigo que es de donde se obtiene la madera para fabricar la marimba que es el instrumento que forma parte de la vida y la cultura musical de este pueblo, es la identidad de la región pues por la sonoridad que tiene al que escucha lo conduce a estados de exaltación espiritual en sus ritos ó a euforia festiva en sus fandangos. Posdata. Datos tomados del libro “En las cuatro Guatemalas” del autor de esta columna editado por la Unidad Editorial del Gobierno del Estado de Jalisco.