El dueño del que fue, durante décadas, el equipo más popular de México –y que, según recientes encuestas, pasó al segundo lugar, detrás del América—afirma que “ya aprendió de futbol”. José Antonio Roca (qepd) replicaría, quizá, que “hay maderas que no agarran el barniz”… Empero, si lo primero es cierto, es probable que “el patrón” entienda que el Guadalajara, desde el retorno de José Luis Real al cargo de director técnico, ha dado un gran paso al frente. * Más concretamente: Real fue llamado en calidad de “bombero”. Se puso en sus manos un equipo que venía cayendo y levantando… hasta que el capricho de ponerlo a merced de Johan Cruyff y de un achichincle suyo, lo encaminó hacia la crisis que se agudizó en la campaña anterior y en la primera parte de la actual. Real llegó a poner orden; no a vender versos, ni a darle por su lado al dueño del juguete. Los resultados conseguidos en lo que va del actual Torneo de Clausura corresponden a la realidad del equipo. Lo mismo cuando perdió en su cancha ante el Cruz Azul que cuando venció al Puebla, a domicilio –el domingo pasado--, se honró a la lógica. Los puntos conseguidos, más los que probablemente se consigan en el resto de la campaña, servirán, por sobre todas las cosas, para evitar que las “Chivas” se vean involucradas, desde la siguiente temporada, en el tema del descenso. * El temor de que quienes toman las decisiones en ese equipo discurran que su equipo está llamado a ser protagonista –en toda la acepción de la palabra-- del campeonato, dependerá de las modificaciones que haya en el tabulador… El Guadalajara, hoy por hoy, es octavo en la clasificación general. Objetivamente, pues, estaría en zona de clasificación para la “Liguilla”… Sin embargo, una lectura desapasionada de la historia llevaría a la conclusión de que hay varios equipos que teóricamente deberían salir de la parte baja del tabulador, ganar posiciones y recuperar aspiraciones de llegar al verdadero campeonato. Si Santos Laguna, León, y en un momento determinado hasta Morelia y Tigres se levantan, la mayor amenaza de su recuperación sería precisamente… para el Guadalajara. Y es ahí donde surge el peligro de que el supuesto “conocedor de futbol” ceda su lugar al villamelón que solía ser, y éste, como acostumbraba, empiece a tomar decisiones rumiadas con el hígado.
