Probado como está que en el futbol mexicano han sido más las excepciones que las ocasiones en que se cumple la regla de que refrende su título en la Liguilla el equipo que termina como líder general en la etapa clasificatoria, la hora de las definiciones a que se llegó una vez cumplida la extensa fase preliminar del certamen, es, también, la hora de las incógnitas.Como en los palenques, pues, se escucha en estos días el grito de: “¡Hagan juego, señores…!”*Está vivo, sin ir más lejos, el recuerdo de la sorpresa que en el precedente Torneo de Clausura dio el Pachuca a costa de los momios del Monterrey como gran favorito. Así, sin elementos de juicio para dar por hecho que la historia vaya a repetirse esta vez a costa del Tijuana —líder general en la etapa regular del actual torneo—, sí hay, en cambio, buenos motivos para apuntar que aún equipos como Pumas (colados a última hora al verdadero campeonato) o Necaxa (invitado sorpresa, considerando que lo normal es que el recién llegado de la División de Ascenso, en su primera campaña confronte problemas con la tabla de cocientes y esté más cerca del infierno que de la gloria) tienen pleno derecho a ser tomados en serio.Varias veces ha sucedido que supuestos intrusos (Pachuca, Morelia o Tijuana, por ejemplo), circunstanciales actores de la Liguilla, se han dedicado a tumbar moños y han terminado por llevarse el gato al agua. Así que…*Para los expertos, tomando en consideración que en la Liguilla suelen equilibrarse las fuerzas y que ningún equipo fue hasta ahora tan convincente en su desempeño y tan aplastante en sus resultados como para apostarle todas las canicas, las individualidades pudieran ser factores determinantes.Sobresalen, en ese aspecto, la presencia del colombiano Dayro Moreno en el Tijuana, la del argentino Franco Jara en el Pachuca —campeón defensor, además—, la del chileno Edson Puch en el Necaxa, o las de Brizuela o Pulido —por los chispazos aislados que tuvieron en la fase regular del certamen— con las Chivas. Ellos, en teoría, podrían hacer la diferencia, a la hora de los mameyes —que ya está próxima— entre los llamados, que son muchos, y los escogidos para pasar a la historia.Al resto de los equipos —unos más decepcionantes que otros—, ahora mismo empezó a cubrirlos el polvo del olvido.
