GUADALAJARA, JALISCO.- Con excepción de Tonalá, que no respondió, los Ayuntamientos de Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque y Tlajomulco gastaron, entre 2016 y este año, 191.8 millones de pesos (MDP) para realizar trabajos de reparación de baches.

El problema es que las alcaldías gastan millones y los baches no ceden. Las lluvias, la falta de mantenimiento, los materiales de baja calidad, el paso de vehículos pesados y el creciente parque vehicular provocan que los hoyos sigan apareciendo. 

Zapopan, por ejemplo, es el que más presupuesto contempla e incrementó sus recursos este año. “El aumento se debe a toda la afectación… había una falta de mantenimiento constante en los pavimentos, estaban muy colapsadas la mayoría de las vialidades. (Pero) el presupuesto aún no es suficiente”, señaló Alejandro Vázquez, director de Pavimentos.

El año pasado, el municipio desembolsó 25 millones de pesos, con los que reparó 116 mil 422 baches y este año tiene 55 millones para seguir atendiendo la problemática. 

Por su parte, Guadalajara tapó 503 mil baches, y entre el año pasado y éste gastará 61 millones (no se incluye el presupuesto para repavimentaciones). Pese a la inversión, la Dirección de Pavimentos refiere que 27% de la superficie se encuentra en mal estado, “son vialidades que tienen años que no se les ha hecho un mantenimiento mínimo y preventivo, por eso están desahuciadas”, detalla el director Omar Paredes Flores.

Después de Guadalajara, Tlajomulco es el que más presupuesto ha destinado para reparar las calles, con 30 millones 383 mil pesos. Sin embargo, las afectaciones persisten en López Mateos, R. Michel, Adolph B. Horn, Javier Mina, circuito Sur, camino San Sebastián a Santa Anita, camino a La Noria, camino viejo a Chapala y Jesús Michel González.

En tanto, Tlaquepaque ya erogó 20 millones, aunque no tiene un conteo de los baches reparados. Desde la Dirección de mantenimiento a pavimentos y vialidades, Javier Reynoso informa que 65% de las vialidades de asfalto está en malas condiciones, “es muy difícil, llegas, tapas el bache y se hace otro a un lado… se hacen baches sobre baches”.

El funcionario defiende las labores, “tapar un bache no es tirar dinero a la basura porque solucionamos momentáneamente la problemática, si tapamos un bache que nos duró tres o cuatro días, son tres o cuatro días que evitamos accidentes. Y si se vuelve a hacer, lo volvemos a tapar”.

En Tonalá, la Dirección de servicios públicos confirma que la mitad de sus pavimentos se encuentra en mal estado, asegura el titular, Sergio González Alcántara.

Proponen una estrategia metropolitana contra baches

Los baches no tienen fin. Desde los Ayuntamientos de Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque y Tonalá se reconoce que el problema se ha dejado crecer a tal grado que hoy, por ejemplo, sólo en Guadalajara se necesitaría una inyección de 12 mil millones de pesos a este renglón. Una cifra imposible de cubrir. 

Las direcciones de Obras Públicas se encargan de reencarpetar calles o colonias enteras, y las de bacheo hacen lo propio con los hoyos en donde la afectación no es tan grave. Aunque las responsabilidades para cada tarea están bien definidas, los recursos etiquetados para ambos rubros siempre resultan insuficientes. 

Por eso los directores de bacheo sugieren una “fusión” de esfuerzos, en la que se debe involucrar el Instituto Metropolitano de Planeación (Imeplan) para, a través de esa instancia, contar con un eje central bajo el cual operar en coordinación y, sobre todo, con igualdad de fondos. 

Omar Paredes, director de Pavimentos en el Ayuntamiento de Guadalajara, afirma que tanto la visión como los fondos deben verse bajo una óptica metropolitana. 

Hay municipios con más dinero asignado a los temas de bacheo y reencarpetado que otros. Las realidades presupuestales de cada uno lo definen así. Sergio González Alcántara, director de Servicios públicos municipales en Tonalá, afirma que “debe haber una partida grande” y homologada para atender cada punto de la metrópoli y beneficiar a la mayor cantidad de personas que a diario transitan por calles dañadas. 

Javier Reynoso, director de Mantenimiento a pavimentos y vialidades de Tlaquepaque, expone que la coordinación resulta indispensable particularmente en las zonas limítrofes, pues los reportes que se reciben con mayor constancia son en esos puntos. 

“Un problema recurrente es en Patria, por la Central Nueva de Autobuses. El lado de Tlaquepaque sí lo bacheamos, pero de repente mi colega de Tonalá no lo bachea, y viceversa (…) Deberíamos tener más coordinación y bajar recursos por lo menos para las calles límites… sería fundamental hacer estos acuerdos y negociaciones para atenderlos a la brevedad”.

En Zapopan, 20% de las calles requiere intervención

Desde que inició la administración de Pablo Lemus en Zapopan, ese Ayuntamiento ha cubierto más de 120 mil baches. Durante décadas, la problemática en las calles de ese municipio ha sido grave. Para octubre de 2015,  la Dirección de Pavimentos calculaba que 30% de sus pavimentos estaba en malas o pésimas condiciones; hoy, se calcula que es una quinta parte.

La problemática ha crecido, y el presupuesto para resarcirla también. El director de Pavimentos, Alejandro Vázquez, expone que en el último trimestre de 2015 trabajó con 700 mil pesos; para 2016 su área tuvo un presupuesto de 25 millones, y para este año incrementó a 35 millones. Pese a esa inyección de fondos, la partida aún se considera insuficiente.

“El aumento se debe por la problemática que hay en el municipio”. Zapopan tiene 22 millones de metros cuadrados entre concreto hidráulico, asfalto, adoquín y empedrado, y de éstos se han reparado un millón 400 mil. De nuevo, la administración en turno argumenta que hubo un descuido por parte de las autoridades predecesoras en las condiciones del pavimento.

El Ayuntamiento incluso ha autorizado un monto de 23 millones para su programa de Mantenimiento Profundo, que inició en agosto pasado. Este recurso se aplica en las vialidades más afectadas, pues se reparan tramos grandes. “Colocamos una nueva carpeta asfáltica”. La Colonia Miramar y la Avenida Vallarta han sido dos de las principales beneficiadas.

La gravedad es tal, que incluso la Dirección de Obras Públicas invirtió 20 millones de pesos más para “bacheo contratado” desde que inició el temporal. “Hoy hemos mitigado considerablemente ese aspecto (los baches). Se han atacado los daños más severos en pavimentos; teníamos muchos problemas en López Mateos, Jardines del Valle, lo que era Juan Gil Preciado y esas calles… aunque sí nos quedan por abatir calles en zonas un poco alejadas en la mancha urbana”.

Así, para 2018 la Dirección solicitará un aumento en su asignación de fondos. “Hay mucho trabajo por hacer pero es notoria la disminución de esta problemática. Con todas las inversiones destinadas veremos mejores resultados en comparativa cuando ingresamos a la administración; el objetivo es tener vialidades en buen estado con mantenimiento constante”.

Guadalajara va por 300 millones

Tal como lo hace el Ayuntamiento de Zapopan, en Guadalajara también se han contratado a cuadrillas externas para reforzar las labores de bacheo. El director de Pavimentos, Omar Paredes, explica que se autorizaron cinco millones de pesos adicionales a los 26 millones de la partida anual para reforzar los trabajos de reparación durante y después del temporal.

En el municipio, los trabajos para mantener las vialidades libres de hoyos alcanzan para abarcar la mitad del problema. “Todavía traemos casi tres millones de metros cuadrados de vialidades con baches que estamos atendiendo (…) El problema en estos es que tendrán que resolverse con obra mayor, y no sólo con el bacheo”. 

También en la capital del Estado se considera que hay vialidades con años de abandono en el mantenimiento preventivo, y que hoy “están prácticamente, en términos clínicos, como desahuciadas”.

Cuando se hizo el primer análisis de las condiciones en que se encuentran los pavimentos, se constató que el 33% de los 25 millones de metros cuadrados en Guadalajara (7.5 millones) estaban en una situación “crítica” o mala. Hoy se han atendido cuatro millones de metros cúbicos, lo que reduce esa afectación.

¿Y qué se hizo? “Primero: un diagnóstico claro de la realidad para saber de qué tamaño era el problema. Segundo: bajar recursos de la Federación para atender el problema. Tercero: tener la capacidad técnica de empresas con la maquinaria adecuada. Y cuarto: una correcta supervisión de parte de la Dirección de Obras y Pavimentos para evitar vicios”.

El bacheo, dice, ya no aplicará en esas zonas “desahuciadas”, pues de poco serviría. Allí se aplicará la estrategia de re-encarpetado, para la cual se están gestionando 300 millones de pesos en 2018. “Y por otra parte el bacheo, que de alguna manera son recursos que se van a tener (30 millones), pero vamos a buscar entre 10 y 15 millones más para darle mantenimiento a las vialidades que están en buenas condiciones para preservar su vida útil, para que en los siguientes temporales no se nos vayan a caer”.

En Tonalá “casi todas” las vialidades están dañadas

Tonalá tiene un problema grave: “casi todas” sus vialidades se encuentran en mal estado, reconoce el director de Servicios públicos municipales, Sergio González Alcántara. Cada semana, ese Ayuntamiento envía a las calles seis camiones con mezcla asfáltica para cubrir los baches. 

Este municipio no contabiliza los baches que ha cubierto, sino las toneladas de mezcla que ha destinado para ese fin. 

Y entre junio de 2016 a junio de 2017 aplicó dos mil 457. “Se bachearon 76 mil 230 metros cuadrados en empedrado; y en asfalto más o menos la misma superficie”. 

Sergio González fue nombrado titular de Servicios Públicos en enero de este año, y evalúa su trabajo de manera positiva. Sostiene que la mejora en las vialidades con respecto a su predecesor es de entre 70% y 80%. “Obviamente durante el temporal nos deteriora más; tapamos uno y se destapa uno más en otro lugar. Hay carpetas asfálticas que tienen entre 30 y 35 años sin recibir un mantenimiento como debió haber tenido”. 

La Cuna Alfarera recibe entre cinco y 15 reportes por semana, y se concentran en las vialidades con mayor tránsito vehicular. 

“No nos alcanza nuestro presupuesto; no nos damos alcance. (El problema de los baches) es un mal generalizado de la zona metropolitana. Por desgracia los baches aparecen y cada municipio debemos tener la responsabilidad de cubrirlos lo más pronto posible, pero es difícil alcanzar el número de baches aunque estemos en tiempo de secas, y por desgracia en los temporales nos dejan muy deterioradas todas las vialidades”.

Fuente:  Ayuntamientos.

TELÓN DE FONDO

Recurren a la responsabilidad patrimonial 

Cuando un ciudadano registra un daño en su vehículo o propiedad, derivado de acciones u omisiones de Gobierno, puede solicitar a las autoridades que paguen el costo por la reparación. 

Aunque el trámite es burocrático (esto debido a personas que han intentado engaños), tres de los municipios metropolitanos ya han invertido casi un millón de pesos en reparación patrimonial. 

Sólo Zapopan acumula 180 expedientes en esta administración, aunque hay 55 más de anteriores administraciones, por los que ha pagado 840 mil pesos. La mayoría de estas solicitudes son por daños que registran los vehículos al caer en baches. 

Tlaquepaque ha recibido 42 solicitudes; ocho de ellas en este año. El municipio reconoce que la mitad es por daños en baches y la otra mitad por daños de maquinaria que poda jardines. “Cuando hay piedras, lanzan algunas y eso ha provocado el rompimiento de cristales de vidrio de vehículos”. El municipio no confirmó el monto pagado por todas las solicitudes, pero sí que ha pagado cuatro mil pesos por dos casos de este año.

Tlajomulco, por su parte, ha recibido más de 30 solicitudes de reparación patrimonial, pero 25 han sido desechadas. En total, el Gobierno de Alberto Uribe erogó 13 mil pesos por daños. La mayoría por hoyos en calles y avenidas que causaron daños a vehículos.

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