Con profunda tristeza nos enteramos que dos equipos más abandonarán las transmisiones en la televisión abierta para migrar a los canales de paga, donde sólo podrán ser vistos cuando jueguen como locales por quienes estén suscritos a un sistema de cable o televisión vía satélite. Se trata de Xolos de Tijuana y Santos de Torreón.En el caso de Tijuana es personalmente triste ya que me tocó vivir en esa ciudad, y de alguna forma ser parte del ascenso de los Xolos a la Primera División, y fuimos el primer intermediario entre el equipo y TV Azteca para la firma del contrato de derechos de transmisión de sus partidos.El argumento es y será que “pagan mejor” en los canales de paga.Y seguramente es cierto, porque la experiencia nos enseñó que la televisión abierta difícilmente pagará porque la transmisión de los partidos regulares de un torneo no son negocio; se tienen ingresos interesantes cuando el equipo pasa a la Liguilla.Pero personalmente creemos que salirse de la televisión abierta es como darse un balazo en un pie. Es cierto que tendrán ingresos importantes en el corto plazo, pero están sacrificando al gran público, a la gran afición, que tendrá limitaciones para ver los partidos. Las cifras son contundentes: 98% de mexicanos tiene televisión abierta, sólo 35% tiene acceso a la televisión de paga, y menos del 8% tiene la capacidad para ver partidos “on demand” tipo lo que fue el fallido proyecto de Chivas TV. Baste decir que aquella célebre coronación en Copa de Chivas, que se transmitió en exclusiva en Chivas TV, fue vista por menos del 10% de su afición. El resto fue marginada.El principal activo de un equipo es su público; los dueños saben que construir una afición importante es tarea de décadas, y muchas veces es imposible.Al migrar a la TV de paga esos equipos marginan al 65% de su afición, y dejan la mesa servida para quienes seguirán en televisión abierta. Quizá no se note en uno o dos torneos, pero a la larga la afición irá mermando, y si de por sí son equipos muy regionalistas que luchan por mantenerse vigentes entre su público, cada vez les costará más trabajo y perderán mucho de lo ganado hasta hoy.Ganan ingresos en el corto plazo, pero pierden a la larga en volumen al perder parte de su gran afición.Y además, se les va a extrañar.(Advertencia: Reconozco que este comentario puede estar sesgado ya que durante más de 22 años mi vida profesional ha transcurrido en la televisión abierta, TV Azteca, donde tuve además la oportunidad de ser Director de Deportes, y soy aficionado de las Chivas, dolido por ver cómo el equipo más popular del futbol mexicano abandonó la televisión abierta).
