Cuatro décadas de diversión

GUADALAJARA, JALISCO (24/DIC/2016).- Volkswagen no sería lo mismo sin el Golf GTI, y es por eso que festejó su cumpleaños, dónde más, sino en la pista del autódromo Miguel E. Abed, en Amozoc, Puebla, bastión en México de la armadora germana.

Dicen que la vida a los 40 es mejor, y al parecer así lo es para este veloz alemán. Un ícono que celebró sus 40 años en el mercado automotriz, y decir verdad, el coche en cuestión es de esos automotores de hito, que marcaron un antes y un después de su llegada, al que muchos rinden pleitesía y que a su edad luce mejor que cualquiera.

Como en toda fiesta hubo varios invitados. Cerca de 200 automóviles de todas las épocas nos ayudaron a recordar la grandeza de este Hot Hatch. Desde la primera y hasta la séptima generación de las variantes Grand Tourer Injection fueron exhibidas en la celebración, incluyendo algunos derivados, como algunos simpáticos VW Caribe, por ejemplo.

No hay mejor tributo que el manejar al festejado, y como el coche fue edificado para ser disfrutado, no podíamos habernos quedado fuera de la pista, donde pudimos comprobar, una vez más, lo divertido que puede ser este cohete de bolsillo. Curvas, rectas, desarrollo de velocidad y frenado, son simplemente un deleite a bordo de este bólido.

La cereza del pastel fue la presencia del Golf GTI Clubsport S, precisamente una edición que conmemora la cuarentena de años de este coche que da mucha de la identidad que hoy tiene la marca.

Pocos son los automóviles con un lugar ganado en la historia, sobre todo en este segmento, mismo que es un poco más alcanzable por los mortales. Es por eso que GTI es lo que es, más allá de ser un simple coche es un modo de vivir para muchos.