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Ciencia y biología: Rodrigo Orozco lucha por salvar las tarántulas de México
Rodrigo tuvo la suerte de obtener apoyo de SEMARNAT para su proyecto, aunque ese apoyo sólo le concede carácter legal, ya que los gastos del laboratorio provienen completamente de él.
Texto y fotos: John y Susy Pint
Definitivamente, dedicar tu vida a una causa noble, no es tan sencillo. Y cuando te encuentras con alguien que a capa y espada ha decidido hacerlo, no dejas de maravillarte; y tal vez más aún cuando se trata de que ese alguien se dedica a “proteger” a bichos que muchos comprarían “sólo para asustar a la suegra”, como dicen por ahí. Y pues como que la idea no te cabe en la cabeza, aunque un día algo mágico ocurre y acabas por descubrir que, después de todo, tales bichos... tienen mucho de hermoso.
Este es el caso de las tarántulas del biólogo Rodrigo Orozco, que comparte su casa con miles de esas criaturas de todos tamaños. “Pero ¿qué es eso y por qué?”, te preguntarás. Bueno, aquí está la explicación: “Mi objetivo es terminar con el tráfico ilegal de tarántulas mexicanas”, nos explica Rodrigo. “Hasta ahora estoy reproduciendo seis mil al año, aunque quiero llegar a las 10 mil que venderé a precios muy bajos. De ese modo se saturará tanto el mercado negro, que la caza furtiva de tarántulas dejará de ser lucrativa, y los traficantes decidirán buscarse otra chamba”.
Luego, con un gesto de enfado nos comenta el caso de un traficante que amontonó 750 tarántulas en una maleta en busca de clientes. El individuo vendió sólo una docena y las demás murieron. “Es bien importante que el público entienda que el tráfico ilegal sólo conduce al maltrato y muerte de esas criaturas fantásticas”, nos dice. Lograr su objetivo, sin embargo, le va a llevar años, ya que para que una tarántula llegue al tamaño y edad ideales para ser adoptada como mascota, hay que esperar 20 años y las tarántulas adultas de Rodrigo tienen sólo cinco años. El precio de una tarántula mexicana en el mercado negro puede rebasar los cien dólares. Muchas son enviadas a Alemania, Estados Unidos y a otras partes del mundo. “La gente no sabe que una tarántula hembra puede engendrar sólo cuatro crías en su vida que llegan a ser adultas. La caza furtiva podría, pues, eliminar esta especie si no se hace algo para detener el tráfico ilegal”.
Docilidad de las tarántulas mexicanas
Las tarántulas pertenecen al género de los arácnidos —Arachnida— y su cuerpo está completamente cubierto de pelo que varía en color. Brasil es el líder mundial en cuanto a número y especies de tarántulas. México es el segundo. Las tarántulas de las Américas llevan en la parte posterior un parche de pelo áspero y punzante que puede causar irritación a la piel de un humano. Usan también esos pelos como arma de defensa. Cuando se enfadan pueden darse la vuelta y arrojar esos minúsculos dardos a su enemigo. Y aunque la mordedura de una tarántula podría causar dolores comparables a la picadura de una abeja, su veneno no causa la muerte. Curiosamente, las tarántulas tienen ocho ojos, aunque sólo pueden distinguir la luz, la oscuridad y el movimiento. En otras palabras, no pueden enfocar hacia un objeto definido. Las tarántulas mexicanas son muy reconocidas por su docilidad. ¡Y pregúntennoslo a nosotros! Fue fantástico observar cómo Rodrigo las tomaba suavemente, y se quedaban tan quietas en donde las posaba... incluso la pequeña Meli Lloyd (en la foto con una Brachypelma smithi) ¡que parecía disfrutar tener incluso una en cada mano!
¡Suerte, Rodrigo!
Afortunadamente, Rodrigo no está sólo en su lucha por salvar a las tarántulas de México. Otros dos biólogos —en Cancún y Puebla— se encuentran también trabajando en proyectos que enfocan hacia la misma finalidad.
El proyecto de Rodrigo Orozco, Tarántulas de México, depende mucho también de la venta de playeras y gorras que se pueden comprar directamente con él, contactándolo a través de: tarantulasmexico@yahoo.com.mx, o también comunicarse con nosotros y encontrar más información y fotos en www.ranchopint.com.
Definitivamente, dedicar tu vida a una causa noble, no es tan sencillo. Y cuando te encuentras con alguien que a capa y espada ha decidido hacerlo, no dejas de maravillarte; y tal vez más aún cuando se trata de que ese alguien se dedica a “proteger” a bichos que muchos comprarían “sólo para asustar a la suegra”, como dicen por ahí. Y pues como que la idea no te cabe en la cabeza, aunque un día algo mágico ocurre y acabas por descubrir que, después de todo, tales bichos... tienen mucho de hermoso.
Este es el caso de las tarántulas del biólogo Rodrigo Orozco, que comparte su casa con miles de esas criaturas de todos tamaños. “Pero ¿qué es eso y por qué?”, te preguntarás. Bueno, aquí está la explicación: “Mi objetivo es terminar con el tráfico ilegal de tarántulas mexicanas”, nos explica Rodrigo. “Hasta ahora estoy reproduciendo seis mil al año, aunque quiero llegar a las 10 mil que venderé a precios muy bajos. De ese modo se saturará tanto el mercado negro, que la caza furtiva de tarántulas dejará de ser lucrativa, y los traficantes decidirán buscarse otra chamba”.
Luego, con un gesto de enfado nos comenta el caso de un traficante que amontonó 750 tarántulas en una maleta en busca de clientes. El individuo vendió sólo una docena y las demás murieron. “Es bien importante que el público entienda que el tráfico ilegal sólo conduce al maltrato y muerte de esas criaturas fantásticas”, nos dice. Lograr su objetivo, sin embargo, le va a llevar años, ya que para que una tarántula llegue al tamaño y edad ideales para ser adoptada como mascota, hay que esperar 20 años y las tarántulas adultas de Rodrigo tienen sólo cinco años. El precio de una tarántula mexicana en el mercado negro puede rebasar los cien dólares. Muchas son enviadas a Alemania, Estados Unidos y a otras partes del mundo. “La gente no sabe que una tarántula hembra puede engendrar sólo cuatro crías en su vida que llegan a ser adultas. La caza furtiva podría, pues, eliminar esta especie si no se hace algo para detener el tráfico ilegal”.
Docilidad de las tarántulas mexicanas
Las tarántulas pertenecen al género de los arácnidos —Arachnida— y su cuerpo está completamente cubierto de pelo que varía en color. Brasil es el líder mundial en cuanto a número y especies de tarántulas. México es el segundo. Las tarántulas de las Américas llevan en la parte posterior un parche de pelo áspero y punzante que puede causar irritación a la piel de un humano. Usan también esos pelos como arma de defensa. Cuando se enfadan pueden darse la vuelta y arrojar esos minúsculos dardos a su enemigo. Y aunque la mordedura de una tarántula podría causar dolores comparables a la picadura de una abeja, su veneno no causa la muerte. Curiosamente, las tarántulas tienen ocho ojos, aunque sólo pueden distinguir la luz, la oscuridad y el movimiento. En otras palabras, no pueden enfocar hacia un objeto definido. Las tarántulas mexicanas son muy reconocidas por su docilidad. ¡Y pregúntennoslo a nosotros! Fue fantástico observar cómo Rodrigo las tomaba suavemente, y se quedaban tan quietas en donde las posaba... incluso la pequeña Meli Lloyd (en la foto con una Brachypelma smithi) ¡que parecía disfrutar tener incluso una en cada mano!
¡Suerte, Rodrigo!
Afortunadamente, Rodrigo no está sólo en su lucha por salvar a las tarántulas de México. Otros dos biólogos —en Cancún y Puebla— se encuentran también trabajando en proyectos que enfocan hacia la misma finalidad.
El proyecto de Rodrigo Orozco, Tarántulas de México, depende mucho también de la venta de playeras y gorras que se pueden comprar directamente con él, contactándolo a través de: tarantulasmexico@yahoo.com.mx, o también comunicarse con nosotros y encontrar más información y fotos en www.ranchopint.com.