México
“Una agradable experiencia”
El objetivo era buscar escenarios económicos relativo a los emprendedores en nuestra localidad
Esta semana tuve una agradable experiencia, sobre todo por lo inesperado, ya que no suelo asistir a presentaciones económicas, pero no pude negarme y fui a ésta, esperando que no fuera muy larga, aunque esperaba fuera tediosa, con conclusiones de macro empresarios muy fuera de mi interés, así que no puedo decir que iba con el mejor espíritu.
La presentación la hacía una entidad denominada Prospera, apoyada por un equipo interdisciplinario de estudiantes, casi todos de posgrado y algunos de licenciatura de las universidades norteamericanas de Berkeley y Duke, actuando en unión del Tecnológico de Monterrey, entiendo que del campus de esta ciudad.
El objetivo era buscar escenarios económicos relativo a los emprendedores en nuestra localidad, eligieron la industria alimenticia debido a la gran cantidad de empresarios de ese ramo que hay en la Entidad; lo singular de este estudio, es que se dedica a los microempresarios, desde aquellos que producen mercancía en su cocina, la mayoría que viven en la informalidad, hasta aquellos que de alguna forma ya constituyen negocios formales, aunque todavía tengan problemas que pudieran considerarse como elementales en un ejercicio adecuado de una empresa.
Contaron para su estudio con el apoyo de la Cámara de la Industria Alimenticia del Estado de Jalisco, sobre todo para localizar a los proveedores y por su conducto a los consumidores, los que por su tamaño y campo de acción son casi imperceptibles de detectar. Durante el proceso al ver la calidad y profesionalismo de la investigación, fueron uniéndose otras cámaras y empresarios.
El estudio provocó la necesidad de crear sistemas de información a los microempresarios y se dio capacitación, con el apoyo de los ayuntamientos de Tlaquepaque y de Zapopan, a nivel elemental a este tipo de empresarios, mostrándoles que no nada más requerían de ellos información, sino fijando objetivos reales, alcanzables por ellos en su actual situación, sin imponerles pesadas cargas sino llevándoles de la mano para que a su propio paso cada quien valore la conveniencia y utilidad práctica de las enseñanzas y respetando el nivel de cada uno de ellos con sugerencias adecuadas para su Estado.
Me gustó que a diferencia de otras acciones que he conocido, este estudio parte de la complejidad del empresario originario, el que tal vez ni siquiera es consciente de que lo es, y que realiza esa actividad simplemente como un medio de supervivencia elemental.
Como primeros resultados del trabajo realizado se detectaron problemas que a mí me resultaron sorprendentes, y yo creo que sorprendería a muchos microempresarios; por ejemplo, ¿sabía usted que lo más costoso que adquiere un productor de mermelada de fruta es el envase? Más de la mitad de su costo es el envase, sorprendente ¿no cree usted?
La presentación la hacía una entidad denominada Prospera, apoyada por un equipo interdisciplinario de estudiantes, casi todos de posgrado y algunos de licenciatura de las universidades norteamericanas de Berkeley y Duke, actuando en unión del Tecnológico de Monterrey, entiendo que del campus de esta ciudad.
El objetivo era buscar escenarios económicos relativo a los emprendedores en nuestra localidad, eligieron la industria alimenticia debido a la gran cantidad de empresarios de ese ramo que hay en la Entidad; lo singular de este estudio, es que se dedica a los microempresarios, desde aquellos que producen mercancía en su cocina, la mayoría que viven en la informalidad, hasta aquellos que de alguna forma ya constituyen negocios formales, aunque todavía tengan problemas que pudieran considerarse como elementales en un ejercicio adecuado de una empresa.
Contaron para su estudio con el apoyo de la Cámara de la Industria Alimenticia del Estado de Jalisco, sobre todo para localizar a los proveedores y por su conducto a los consumidores, los que por su tamaño y campo de acción son casi imperceptibles de detectar. Durante el proceso al ver la calidad y profesionalismo de la investigación, fueron uniéndose otras cámaras y empresarios.
El estudio provocó la necesidad de crear sistemas de información a los microempresarios y se dio capacitación, con el apoyo de los ayuntamientos de Tlaquepaque y de Zapopan, a nivel elemental a este tipo de empresarios, mostrándoles que no nada más requerían de ellos información, sino fijando objetivos reales, alcanzables por ellos en su actual situación, sin imponerles pesadas cargas sino llevándoles de la mano para que a su propio paso cada quien valore la conveniencia y utilidad práctica de las enseñanzas y respetando el nivel de cada uno de ellos con sugerencias adecuadas para su Estado.
Me gustó que a diferencia de otras acciones que he conocido, este estudio parte de la complejidad del empresario originario, el que tal vez ni siquiera es consciente de que lo es, y que realiza esa actividad simplemente como un medio de supervivencia elemental.
Como primeros resultados del trabajo realizado se detectaron problemas que a mí me resultaron sorprendentes, y yo creo que sorprendería a muchos microempresarios; por ejemplo, ¿sabía usted que lo más costoso que adquiere un productor de mermelada de fruta es el envase? Más de la mitad de su costo es el envase, sorprendente ¿no cree usted?