México
Miles de devotos coinciden con quienes buscan el voto
Los presidenciables y demás clase política atestiguan el acto litúrgico y dejan de lado asperezas
SILAO, GUANAJNUATO (26/MAR/2012).- Día de milagros, pero no todos los esperados.
Políticos que declaran su abierto catolicismo, otros menos devotos, pero todos en busca del voto, acudieron al pie del Cerro del Cubilete donde Benedicto XVI, en el Parque Bicentenario, ofreció una misa ante 640 mil feligreses, según estimaciones del Vaticano.
Desde las 07:30 horas comenzaron a desfilar políticos de todos los colores. “Vengo como católico, pero reconozco el Estado laico”, decía Marco Antonio Adame, gobernador panista de Morelos, que al recibir la comunión de manos del Pontífice se arrodilló en el reclinatorio, como hizo el mandatario guanajuatense, Juan Manuel Oliva. Felipe Calderón se inclinó, comulgó, pero no se arrodilló ante el Papa.
El ex presidente Vicente Fox, con amplio sombrero y lentes obscuros, fue de los primeros en arribar, acompañado d e su esposa Marta Sahagún.
Josefina Vázquez Mota, candidata presidencial del PAN, se apersonó antes de las ocho de la mañana acompañada de su esposo e hijas. Luego llegó López Obrador con su esposa Beatriz Gutiérrez. Casi al mismo tiempo Gabriel Quadri que se dio tiempo de redactar tuits durante la misa.
Al final Enrique Peña Nieto y su esposa Angélica Rivera, quienes dieron los pasos necesarios para saludar a Vázquez Mota y su familia. “Suerte, ya nos veremos en la campaña”, se dijeron mutuamente, palabras más, palabras menos.
No faltó quien gritara “¡Josefina, Josefina”, al paso del priista.
López Obrador tampoco se libró de quienes alzaron la voz: “No al aborto, viva la vida”. El tabasqueño declaró que le gustó el mensaje papal “de unidad, de paz y no de intolerancia”. No comulgó ni se arrodilló en momentos clave de la misa.
Peña Nieto dio su opinión sobre la comunión de Calderón. “Creo que cada quien profesa su fe como lo considera. En mi caso, observaré y profesaré mi fe de manera muy íntima”.
NUMERALIA
La atención y el apoyo
671 consultas médicas generales se otorgaron hasta ayer por la mañana.
28 atenciones a embarazadas.
18 de urgencias.
14 referencias a hospitales.
2 personas por picaduras de alacrán.
5 hospitales de campaña, ((cuatro en la Expo Bicentenario y uno en el Mesón de San Antonio en Guanajuato), dentro de las Caravanas de la Salud para brindar atención médica a quien lo solicitara.
324 elementos de los Servicios Estatales de Salud, Urgencias Médicas del Estado de Guanajuato (SUEG), Cenaprece y la Dirección General Adjunta de Epidemiología (DGEPI).
63 médicos.
21 epidemiólogos.
126 enfermeras y 15 psicólogos, entre otros.
CRÓNICA
Viajan para ver al Papa
El Parque Guanajuato Bicentenario, construido en 2010 para conmemorar los 200 años de la gesta de la Independencia, fue el escenario para que los católicos escucharan al Papa Benedicto XVI.
Desde Sinaloa y sin boletos para la misa, Carlos Domínguez y su familia acudieron al evento.
“Teníamos que venir, no había de otra, nos venimos sin boletos porque no tuvimos la suerte de ser seleccionados en nuestro templo, y la idea era venir a escuchar el mensaje del Papa”. Ni el frío de la madrugada ni el fuerte sol del medio día, doblaron a los asistentes.
Mercedes Salazar, originaria de Tamaulipas, consiguió un par de boletos de última hora. “Ya me había hecho a la idea de quedarme en casa (...) de última hora me avisaron de mi parroquia que tenía dos y me vine con mi nuera”.
Políticos que declaran su abierto catolicismo, otros menos devotos, pero todos en busca del voto, acudieron al pie del Cerro del Cubilete donde Benedicto XVI, en el Parque Bicentenario, ofreció una misa ante 640 mil feligreses, según estimaciones del Vaticano.
Desde las 07:30 horas comenzaron a desfilar políticos de todos los colores. “Vengo como católico, pero reconozco el Estado laico”, decía Marco Antonio Adame, gobernador panista de Morelos, que al recibir la comunión de manos del Pontífice se arrodilló en el reclinatorio, como hizo el mandatario guanajuatense, Juan Manuel Oliva. Felipe Calderón se inclinó, comulgó, pero no se arrodilló ante el Papa.
El ex presidente Vicente Fox, con amplio sombrero y lentes obscuros, fue de los primeros en arribar, acompañado d e su esposa Marta Sahagún.
Josefina Vázquez Mota, candidata presidencial del PAN, se apersonó antes de las ocho de la mañana acompañada de su esposo e hijas. Luego llegó López Obrador con su esposa Beatriz Gutiérrez. Casi al mismo tiempo Gabriel Quadri que se dio tiempo de redactar tuits durante la misa.
Al final Enrique Peña Nieto y su esposa Angélica Rivera, quienes dieron los pasos necesarios para saludar a Vázquez Mota y su familia. “Suerte, ya nos veremos en la campaña”, se dijeron mutuamente, palabras más, palabras menos.
No faltó quien gritara “¡Josefina, Josefina”, al paso del priista.
López Obrador tampoco se libró de quienes alzaron la voz: “No al aborto, viva la vida”. El tabasqueño declaró que le gustó el mensaje papal “de unidad, de paz y no de intolerancia”. No comulgó ni se arrodilló en momentos clave de la misa.
Peña Nieto dio su opinión sobre la comunión de Calderón. “Creo que cada quien profesa su fe como lo considera. En mi caso, observaré y profesaré mi fe de manera muy íntima”.
NUMERALIA
La atención y el apoyo
671 consultas médicas generales se otorgaron hasta ayer por la mañana.
28 atenciones a embarazadas.
18 de urgencias.
14 referencias a hospitales.
2 personas por picaduras de alacrán.
5 hospitales de campaña, ((cuatro en la Expo Bicentenario y uno en el Mesón de San Antonio en Guanajuato), dentro de las Caravanas de la Salud para brindar atención médica a quien lo solicitara.
324 elementos de los Servicios Estatales de Salud, Urgencias Médicas del Estado de Guanajuato (SUEG), Cenaprece y la Dirección General Adjunta de Epidemiología (DGEPI).
63 médicos.
21 epidemiólogos.
126 enfermeras y 15 psicólogos, entre otros.
CRÓNICA
Viajan para ver al Papa
El Parque Guanajuato Bicentenario, construido en 2010 para conmemorar los 200 años de la gesta de la Independencia, fue el escenario para que los católicos escucharan al Papa Benedicto XVI.
Desde Sinaloa y sin boletos para la misa, Carlos Domínguez y su familia acudieron al evento.
“Teníamos que venir, no había de otra, nos venimos sin boletos porque no tuvimos la suerte de ser seleccionados en nuestro templo, y la idea era venir a escuchar el mensaje del Papa”. Ni el frío de la madrugada ni el fuerte sol del medio día, doblaron a los asistentes.
Mercedes Salazar, originaria de Tamaulipas, consiguió un par de boletos de última hora. “Ya me había hecho a la idea de quedarme en casa (...) de última hora me avisaron de mi parroquia que tenía dos y me vine con mi nuera”.