México
El proveedor del ''Che'' Guevara en México
El nativo de Ayotzingo llevaba provisiones a quienes fraguaron la revolución cubana
AYOTZINGO, ESTADO DE MÉXICO (20/FEB/2012).- Eulogio sabía dónde se escondían Ernesto “Che” Guevara, Fidel Castro y sus hombres, pero no se lo dijo a los agentes de la Policía cuando lo interrogaron, al contrario, los despistó para que no dieran con ellos.
Hizo esto no por creer en los ideales revolucionarios, si no para protegerse, pues durante cuatro meses él les llevó provisiones hasta el cerro del Ayaquemetl, ubicado en la comunidad de Ayotzingo, Chalco, donde practicaban tácticas de guerrilla para derrocar a Fulgencio Batista.
La discreción de Eulogio Ruiz Pozos de poco sirvió a los rebeldes; a los pocos días, decenas de hombres llegaron al poblado, eran de la extinta Dirección Federal de Seguridad, encabezada por Fernando Gutiérrez Barrios. Capturaron a todos.
A 56 años de aquellos acontecimientos, el cerro del Ayaquemetl se llena de casas, la mayoría de los árboles y la fauna que existían en la década de los años 50 han sido depredados, el rancho San Miguel, rentado por Fidel y Guevara en esta comunidad para refugiarse se desmorona, no hay una ruta que explique que los cubanos estuvieron aquí, la historia va quedando en el olvido.
Eulogio se resiste a dar esta entrevista, apenas se recupera de una embolia y la hernia de su abdomen lleva mucho tiempo sin sanar. Dice que de todo eso hace ya mucho tiempo, que Fidel prometió reparar la iglesia del pueblo pero no lo hizo y que Guevara le llegó a pagar con botellas de whisky por subir provisiones hasta el cerro. Cree que cuando muera parte de esta historia se irá con él, él es el único de los pobladores que aún vive y que vio a los guerrilleros.
Pedro Elizalde, habitante de Ayotzingo, ha recopilado parte de la historia de Fidel Castro y Ernesto Guevara en este poblado. Dice que el propietario del Rancho San Miguel era Erasmo Rivera, quien en la década de los años 50 se trasladaba hasta la Ciudad de México para vender los quesos que producía.
Elizalde cree que de esta forma Erasmo conoce a los rebeldes que en aquel entonces se reunían en la capital para fraguar el derrocamiento de Batista.
Supone que en algún momento Rivera los lleva al rancho y ellos ven que el cerro de junto, es decir el Ayaquemetl, es conveniente para sus planes toda vez que se parece a Sierra Maestra en Cuba, lugar desde el cual iniciarían la revuelta en contra del dictador.
En 1956 Eulogio, con alrededor de 22 años de edad, poseía vacas y algunos terrenos en el cerro de Ayotzingo. Él tenía amistad con Erasmo Rivera, dueño del Rancho San Miguel y uno de los pocos que supo de la presencia de Fidel y el “Che”.
El estado actual del Rancho San Miguel es crítico, en el lugar sólo vive la viuda de Erasmo Rivera, quien ya no quiere hablar más de los cubanos. Los torreones de la construcción están deteriorados, las puertas oxidadas, un muro fue sustituido por una lámina de metal.
Al rancho San Miguel también se le conoció como Santa Rosa. De acuerdo con Eulogio, fue Guevara quien lo rebautizó para despistar a quienes los persiguieran.
Los rebeldes capturados
Ni siquiera Eulogio sabe los nombres de los rebeldes que fueron capturados en Ayotzingo en 1956.
Un documento firmado entonces por Fernando Gutiérrez Barrios, mismo que yace en el Archivo General de la Nación (AGN), menciona que eran los siguientes: Tomás Electo Pedroza Pinto, Horacio Rodríguez Hernández, Calixto García Martínez, Santiago Hirzel, Eduardo Roig, Luis Crespo Castro, Félix Agucar Rodríguez, Rolando Santana Reyes, Arturo Charmont, Celso Marazoto, Óscar Rodríguez Delgado, Ricardo Bonachea, Ernesto Guevara y Víctor Trapote, este último escultor y ex combatiente de la Guerra Civil Española.
Sólo 10 de ellos aparecen en la lista creada por la misma Dirección Federal de Seguridad en 1962, sobre los 64 tripulantes del yate Granma que partieron de Tuxpan, Veracruz, hacia Cuba, el 2 de diciembre de 1956.
La captura de estos personajes, el 24 de junio del 56, se deriva de la detención del 21 de junio de ese mismo año de Fidel Castro, Ciro Redondo García, Universo Sánchez Álvarez, Ramiro Valdez Menéndez y Reynaldo Benítez Nápoles en calles de la Ciudad de México.
Ellos viajaban a bordo de un Packard 1950 color verde con placas IW55655 de Miami, según se lee en el documento del Archivo General de la Nación. Gutiérrez Barrios lo dejó ir, luego partieron a Veracruz, el resto de la historia es conocida.
El DATO
Se prepararon en el país
Ernesto “Che” Guevara estuvo en México entre 1954 y 1956. Aquí se unió —en 1955— al Movimiento 26 de Julio, que encabezó Fidel Castro Ruz y cuyo objetivo era derrocar al dictador cubano Fulgencio Batista (1940-1944 / 1952-1959).
FRASE
''Fidel Castro prometió reconstruir la iglesia y no lo hizo; el ‘Che’ me pagaba con botellas de whisky por llevarles provisiones hasta el cerro ''
Eulogio Ruiz Pozos.
Hizo esto no por creer en los ideales revolucionarios, si no para protegerse, pues durante cuatro meses él les llevó provisiones hasta el cerro del Ayaquemetl, ubicado en la comunidad de Ayotzingo, Chalco, donde practicaban tácticas de guerrilla para derrocar a Fulgencio Batista.
La discreción de Eulogio Ruiz Pozos de poco sirvió a los rebeldes; a los pocos días, decenas de hombres llegaron al poblado, eran de la extinta Dirección Federal de Seguridad, encabezada por Fernando Gutiérrez Barrios. Capturaron a todos.
A 56 años de aquellos acontecimientos, el cerro del Ayaquemetl se llena de casas, la mayoría de los árboles y la fauna que existían en la década de los años 50 han sido depredados, el rancho San Miguel, rentado por Fidel y Guevara en esta comunidad para refugiarse se desmorona, no hay una ruta que explique que los cubanos estuvieron aquí, la historia va quedando en el olvido.
Eulogio se resiste a dar esta entrevista, apenas se recupera de una embolia y la hernia de su abdomen lleva mucho tiempo sin sanar. Dice que de todo eso hace ya mucho tiempo, que Fidel prometió reparar la iglesia del pueblo pero no lo hizo y que Guevara le llegó a pagar con botellas de whisky por subir provisiones hasta el cerro. Cree que cuando muera parte de esta historia se irá con él, él es el único de los pobladores que aún vive y que vio a los guerrilleros.
Pedro Elizalde, habitante de Ayotzingo, ha recopilado parte de la historia de Fidel Castro y Ernesto Guevara en este poblado. Dice que el propietario del Rancho San Miguel era Erasmo Rivera, quien en la década de los años 50 se trasladaba hasta la Ciudad de México para vender los quesos que producía.
Elizalde cree que de esta forma Erasmo conoce a los rebeldes que en aquel entonces se reunían en la capital para fraguar el derrocamiento de Batista.
Supone que en algún momento Rivera los lleva al rancho y ellos ven que el cerro de junto, es decir el Ayaquemetl, es conveniente para sus planes toda vez que se parece a Sierra Maestra en Cuba, lugar desde el cual iniciarían la revuelta en contra del dictador.
En 1956 Eulogio, con alrededor de 22 años de edad, poseía vacas y algunos terrenos en el cerro de Ayotzingo. Él tenía amistad con Erasmo Rivera, dueño del Rancho San Miguel y uno de los pocos que supo de la presencia de Fidel y el “Che”.
El estado actual del Rancho San Miguel es crítico, en el lugar sólo vive la viuda de Erasmo Rivera, quien ya no quiere hablar más de los cubanos. Los torreones de la construcción están deteriorados, las puertas oxidadas, un muro fue sustituido por una lámina de metal.
Al rancho San Miguel también se le conoció como Santa Rosa. De acuerdo con Eulogio, fue Guevara quien lo rebautizó para despistar a quienes los persiguieran.
Los rebeldes capturados
Ni siquiera Eulogio sabe los nombres de los rebeldes que fueron capturados en Ayotzingo en 1956.
Un documento firmado entonces por Fernando Gutiérrez Barrios, mismo que yace en el Archivo General de la Nación (AGN), menciona que eran los siguientes: Tomás Electo Pedroza Pinto, Horacio Rodríguez Hernández, Calixto García Martínez, Santiago Hirzel, Eduardo Roig, Luis Crespo Castro, Félix Agucar Rodríguez, Rolando Santana Reyes, Arturo Charmont, Celso Marazoto, Óscar Rodríguez Delgado, Ricardo Bonachea, Ernesto Guevara y Víctor Trapote, este último escultor y ex combatiente de la Guerra Civil Española.
Sólo 10 de ellos aparecen en la lista creada por la misma Dirección Federal de Seguridad en 1962, sobre los 64 tripulantes del yate Granma que partieron de Tuxpan, Veracruz, hacia Cuba, el 2 de diciembre de 1956.
La captura de estos personajes, el 24 de junio del 56, se deriva de la detención del 21 de junio de ese mismo año de Fidel Castro, Ciro Redondo García, Universo Sánchez Álvarez, Ramiro Valdez Menéndez y Reynaldo Benítez Nápoles en calles de la Ciudad de México.
Ellos viajaban a bordo de un Packard 1950 color verde con placas IW55655 de Miami, según se lee en el documento del Archivo General de la Nación. Gutiérrez Barrios lo dejó ir, luego partieron a Veracruz, el resto de la historia es conocida.
El DATO
Se prepararon en el país
Ernesto “Che” Guevara estuvo en México entre 1954 y 1956. Aquí se unió —en 1955— al Movimiento 26 de Julio, que encabezó Fidel Castro Ruz y cuyo objetivo era derrocar al dictador cubano Fulgencio Batista (1940-1944 / 1952-1959).
FRASE
''Fidel Castro prometió reconstruir la iglesia y no lo hizo; el ‘Che’ me pagaba con botellas de whisky por llevarles provisiones hasta el cerro ''
Eulogio Ruiz Pozos.