México

''Acuerdos en la cúpula''

He pensado mucho en la situación de violencia que vive el país y me pregunto si cuando menos en nuestro entorno es algo que percibimos directamente o es reflejo de lo que dicen los medios

He pensado mucho en la situación de violencia que vive el país y me pregunto si cuando menos en nuestro entorno es algo que percibimos directamente o es reflejo de lo que dicen los medios que está pasando o tal vez yo he sido muy afortunado de que en mi entorno lo más dramático que ha sucedido es un robo en la oficina y tres autos robados, lo que de cierto no es agradable, pero no creo que sea para vivir angustiado permanentemente.

Desde luego no es porque sea muy valiente, no lo soy, incluso debo confesar que un pariente que murió en la guerra falleció no por valiente sino de hambre porque le daba miedo salir de la trinchera y que le dieran un balazo. No es por ahí, pero que quiere, me da más miedo morir víctima de un vacuno que de una bala, me parece más cercano.

Con esto no pretendo disminuir la gravedad de lo que está sucediendo en el país, es muy grave la situación, pero no podemos saber que tan cercana a nosotros es esa gravedad y no podemos saberlo porque no podemos tener ninguna confianza en lo que nos dicen nuestras amadas autoridades, en primer lugar porque sus informaciones no parecen confiables, se contradicen a sí mismos. Nos piden calma y vemos cuando llega un alto funcionario a algún sitio siempre lo hace rodeado de nubes de guaruras y si la reunión es con otros chipocludos pues se observará un verdadero ejército de guarros, lo entendería si se tratara de barberos que van a la gorreada, pero no, los jerarcas no se juntan con el peladaje, se dejan cuidar con lo que usted y yo pagamos voluntariamente a fuerzas; por eso es que no podemos confiar en ellas. La segunda causa es que los funcionarios están preocupados no por la gravedad del asunto sino cómo pueden aprovechar lo que está pasando para obtener el resultado que esperan en 2012 y créame, todos lo esperan sin importar que a nosotros nos lleve el diablo.

Hace pocas semanas el señor gobernador trató de mejorar su posición como candidato a la gran ubre presidencial, citando a un ex gobernador priista a que no conozco ni sé cómo se llama que dijo que antes los gobernantes se entendían con los malos y por eso no había violencia y el jerarca estatal pareció muy complacido de los efectos de su declaración. A mí me pareció un grave insulto al Presidente Calderón al dudar de su congruencia porque que yo sepa hay cinco ex presidentes que no han muerto (no puedo decir que estén vivos, pero cuando menos respiran) y si la afirmación es cierta y el presidente no actúa contra ellos puede presumirse que o les tiene miedo o está de acuerdo con ellos.

Temas

Sigue navegando