Jalisco
Presentan a tres relacionados con matanza; van por otros siete
Aseguran que los 26 cuerpos abandonados en los Arcos del Milenio corresponden a sujetos que trabajaban para el cártel Jalisco Nueva Generación
GUADALAJARA, JALISCO (09/DIC/2011).- La tarde de ayer, en las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Jalisco (PGJEJ), fueron presentados ante los medios de comunicación tres presuntos responsables de los homicidios de las 26 personas cuyos cuerpos fueron encontrados en tres camionetas en los Arcos del Milenio de Guadalajara, el pasado 24 de noviembre.
Y es que, exactamente 15 días después de lo ocurrido, la fiscalía estatal, en voz de su titular, Tomás Coronado Olmos, mencionó la identidad de los detenidos involucrados en los asesinatos, así como también los motivos por los cuales fueron privadas de la vida las 26 personas.
“Las declaraciones que emitieron las personas detenidas mencionan que (...) todos, los siete (homicidios) en los que ellos participaron, de un solo vehículo, tenían relación con un cártel contrario”, informó el primer fiscal.
Y agregó: “Con la declaración de los detenidos quedan resueltas siete muertes, que son del caso de los cuerpos encontrados en la camioneta RAM blanca, con siete cadáveres. Los detenidos declararon que los siete eran integrantes de un cártel contrario”, explicó.
Además, indicó que se hará justicia en contra de los detenidos: “Independientemente de que sean o no de los cárteles o de lo que sean, la autoridad los considera como víctimas”.
Coronado Olmos también aseguró que por lo pronto se cuenta con la identidad de otros siete sujetos involucrados en el multihomicidio.
Por su parte, sobre los detenidos, el jefe de la célula u “oficina”, como la denominan ellos, es José Luis Herrera Solares, en tanto que sus cómplices son Rigoberto Robles Farías y José Trinidad Escobar Salmerón, quienes confesaron recibir entre 10 mil y 20 mil pesos como sueldo para trabajar con el cártel del Milenio.
Los tres coincidieron en que recibieron órdenes de “levantar” y matar a miembros del grupo rival, en este caso del Cártel Jalisco Nueva Generación, señalando también que en la masacre participaron tres distintas “oficinas” o grupos. Sin embargo, los ahora detenidos sólo se vieron involucrados directamente en la muerte de siete de los 26 fallecidos, los cuales fueron asesinados en la finca marcada con el número 159, de la calle Torremolinos, en la Colonia Lomas de Zapopan, en la ex Villa Maicera.
Al ser interrogados por la prensa sobre si efectivamente las víctimas pertenecían a algún grupo del crimen organizado, el procurador Tomás Coronado Olmos contestó que eso era lo que decían los detenidos en sus primeras declaraciones.
Versiones de los detenidos
Al ser cuestionados por los medios de comunicación, Rigoberto Robles Farías, uno de los tres detenidos por la masacre de los Arcos del Milenio, afirmó que todos los fallecidos tardaron en ser ubicados un mes.
“El ‘halcón’ que trabajaba para nosotros los ubicó por un mes, les tomó las fotos, las bajó y nos las pasaron, y ya nosotros fuimos los que los ‘levantamos’”, mencionó Robles Farías.
Asimismo, el trío de sujetos descartó que entre las víctimas hubiera algún inocente, ya que todos coincidieron en señalar que los fallecidos eran de sus rivales, a quienes llamaron de manera despectiva “torcidos”, pese a que ese grupo rival se autodenomina el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Desconocieron saber quién escribió el texto de la manta encontrada junto con los cadáveres. Además, Robles Farías confesó haber participado en 48 homicidios ocurridos en los estados de Jalisco y Michoacán.
Por su parte, José Luis Herrera Solares dijo ser el líder de la célula u “oficina”, y confesó que su jefe directo es un sujeto al que conoce como “El Tello”, afirmando también que entre las víctimas no habían inocentes: “No, ellos vendían droga y eso”, dijo Herrera Solares.
Mientras tanto, José Trinidad Escobar Salmerón manifestó que recibía 10 mil pesos mensuales como sueldo por parte del cártel del Milenio, y afirmó que también participó en el asesinato de las siete personas que fueron halladas muertas al interior de una camioneta Dodge Ram, blanca, en la cual él iba como copiloto.
TELÓN DE FONDO
Lucha entre cárteles
El pasado martes, el general y jefe de la V Región Militar, Fausto Lozano Espinoza confirmó la presencia de seis cárteles en Jalisco: el cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), el cártel del Milenio, el cártel del Pacificó dirigido por Joaquín “El Chapo Guzmán”, además de La Resistencia, células de Los Zetas y de la Familia Michoacana.
Además de la Zona Metropolitana, la Región Norte (frontera con Zacatecas) y Ciénega (frontera con Michoacán) son las que registran mayor presencia de grupos delictivos.
Tras el hallazgo de los cuerpos, el pasado 24 de noviembre, Eduardo Guerrero, especialista de la Universidad de Guadalajara en temas de seguridad pública explicó que el acontecimiento podría atribuirse al cártel de Los Zetas (autoridades confirman que los autores provienen del cártel del Milenio), como una venganza de Los Zetas contra el cartel de Sinaloa por la aparición en septiembre de una treintena de muertos en Boca del Río-Veracruz. El analista enfatizó que el hallazgo es un mensaje claro de la posibilidad que tienen los cárteles de de impactar en los núcleos territoriales de mayor arraigo, en una pugna por extender sus territorios.
DATO
El móvil
De las investigaciones se desprende que el móvil fue causar terror a integrantes del cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), por ser sus contrarios, además de causar terror al Gobierno.
Y es que, exactamente 15 días después de lo ocurrido, la fiscalía estatal, en voz de su titular, Tomás Coronado Olmos, mencionó la identidad de los detenidos involucrados en los asesinatos, así como también los motivos por los cuales fueron privadas de la vida las 26 personas.
“Las declaraciones que emitieron las personas detenidas mencionan que (...) todos, los siete (homicidios) en los que ellos participaron, de un solo vehículo, tenían relación con un cártel contrario”, informó el primer fiscal.
Y agregó: “Con la declaración de los detenidos quedan resueltas siete muertes, que son del caso de los cuerpos encontrados en la camioneta RAM blanca, con siete cadáveres. Los detenidos declararon que los siete eran integrantes de un cártel contrario”, explicó.
Además, indicó que se hará justicia en contra de los detenidos: “Independientemente de que sean o no de los cárteles o de lo que sean, la autoridad los considera como víctimas”.
Coronado Olmos también aseguró que por lo pronto se cuenta con la identidad de otros siete sujetos involucrados en el multihomicidio.
Por su parte, sobre los detenidos, el jefe de la célula u “oficina”, como la denominan ellos, es José Luis Herrera Solares, en tanto que sus cómplices son Rigoberto Robles Farías y José Trinidad Escobar Salmerón, quienes confesaron recibir entre 10 mil y 20 mil pesos como sueldo para trabajar con el cártel del Milenio.
Los tres coincidieron en que recibieron órdenes de “levantar” y matar a miembros del grupo rival, en este caso del Cártel Jalisco Nueva Generación, señalando también que en la masacre participaron tres distintas “oficinas” o grupos. Sin embargo, los ahora detenidos sólo se vieron involucrados directamente en la muerte de siete de los 26 fallecidos, los cuales fueron asesinados en la finca marcada con el número 159, de la calle Torremolinos, en la Colonia Lomas de Zapopan, en la ex Villa Maicera.
Al ser interrogados por la prensa sobre si efectivamente las víctimas pertenecían a algún grupo del crimen organizado, el procurador Tomás Coronado Olmos contestó que eso era lo que decían los detenidos en sus primeras declaraciones.
Versiones de los detenidos
Al ser cuestionados por los medios de comunicación, Rigoberto Robles Farías, uno de los tres detenidos por la masacre de los Arcos del Milenio, afirmó que todos los fallecidos tardaron en ser ubicados un mes.
“El ‘halcón’ que trabajaba para nosotros los ubicó por un mes, les tomó las fotos, las bajó y nos las pasaron, y ya nosotros fuimos los que los ‘levantamos’”, mencionó Robles Farías.
Asimismo, el trío de sujetos descartó que entre las víctimas hubiera algún inocente, ya que todos coincidieron en señalar que los fallecidos eran de sus rivales, a quienes llamaron de manera despectiva “torcidos”, pese a que ese grupo rival se autodenomina el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Desconocieron saber quién escribió el texto de la manta encontrada junto con los cadáveres. Además, Robles Farías confesó haber participado en 48 homicidios ocurridos en los estados de Jalisco y Michoacán.
Por su parte, José Luis Herrera Solares dijo ser el líder de la célula u “oficina”, y confesó que su jefe directo es un sujeto al que conoce como “El Tello”, afirmando también que entre las víctimas no habían inocentes: “No, ellos vendían droga y eso”, dijo Herrera Solares.
Mientras tanto, José Trinidad Escobar Salmerón manifestó que recibía 10 mil pesos mensuales como sueldo por parte del cártel del Milenio, y afirmó que también participó en el asesinato de las siete personas que fueron halladas muertas al interior de una camioneta Dodge Ram, blanca, en la cual él iba como copiloto.
TELÓN DE FONDO
Lucha entre cárteles
El pasado martes, el general y jefe de la V Región Militar, Fausto Lozano Espinoza confirmó la presencia de seis cárteles en Jalisco: el cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), el cártel del Milenio, el cártel del Pacificó dirigido por Joaquín “El Chapo Guzmán”, además de La Resistencia, células de Los Zetas y de la Familia Michoacana.
Además de la Zona Metropolitana, la Región Norte (frontera con Zacatecas) y Ciénega (frontera con Michoacán) son las que registran mayor presencia de grupos delictivos.
Tras el hallazgo de los cuerpos, el pasado 24 de noviembre, Eduardo Guerrero, especialista de la Universidad de Guadalajara en temas de seguridad pública explicó que el acontecimiento podría atribuirse al cártel de Los Zetas (autoridades confirman que los autores provienen del cártel del Milenio), como una venganza de Los Zetas contra el cartel de Sinaloa por la aparición en septiembre de una treintena de muertos en Boca del Río-Veracruz. El analista enfatizó que el hallazgo es un mensaje claro de la posibilidad que tienen los cárteles de de impactar en los núcleos territoriales de mayor arraigo, en una pugna por extender sus territorios.
DATO
El móvil
De las investigaciones se desprende que el móvil fue causar terror a integrantes del cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), por ser sus contrarios, además de causar terror al Gobierno.