Jalisco

Ponen a disposición de juzgado a 12 policías de Jalisco arraigados

Los agentes municipales quedarán a disposición del Juzgado de lo Penal con sede en Lagos de Moreno

GUADALAJARA, JALISCO (24/MAY/2010).- La Procuraduría General de Justicia del Estado ( PGJE) cumplimentó dos órdenes de aprehensión en contra de los 12 policías municipales de Ojuelos, quienes se encontraban bajo arraigo por su presunta relación con la delincuencia organizada.

La dependencia agregó que los agentes municipales quedarán a disposición del Juzgado de lo Penal con sede en Lagos de Moreno, por los delitos de secuestro y delincuencia organizada.

Los elementos consignados son Epigmenio Alvarez Vázquez, de 44 años y quien fungía como comandante; Gaspar Torres Ramírez, de 28; Javier Gaytán Ortiz, de 45; José Mascorro Valadez, de 46, y quien era comandante, así como Alvaro de Jesús Mascorro Valadez, de 23 y quien fungía como subdirector.

También se encuentran en esta lista Rosendo Ortiz Domínguez, de 32 años; Gilberto Ibarra Hernández, de 33; José Mario González Moreno, de 29; José Mauricio Hernández Piña, de 23; Juan Cleto Rodríguez, de 30; Erick Salvador López Torres, de 26, y César Alejandro Rangel Salcedo, de 29.

Algunos de los agentes bajo arraigo señalaron que recibían aproximadamente 160 mil pesos cada 30 ó 45 días, por parte de un grupo delictivo, dinero que era recogido por el comandante Epigmenio Alvarez Vázquez, quien lo entregaba al subdirector Alvaro de Jesús Mascorro Valadez, para que a su vez lo distribuyera.

Se repartían 10 mil pesos al subdirector, siete mil a los comandantes, cuatro mil a oficiales y tres mil a policías de línea.  

En las investigaciones se estableció que a cambio de dicho dinero, los ahora detenidos filtraban información al grupo delictivo del que recibían dinero, para que supieran cuándo las autoridades estatales o federales ingresaban al municipio.

Además, se retiraban cuando el grupo delictivo iba a cometer algún delito en la zona y algunos participaron en privar de su libertad a personas para entregárselas en otro estado (San Luis Potosí) al grupo delictivo; y señalaban a otros civiles a los que los miembros de la organización no conocían físicamente, para que fueron plagiados por estos últimos.

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