Internacional
Indígenas bolivianos queman banderas de Francia y UE
Un grupo de personas apedreó y bloqueó la embajada francesa en La Paz
LA PAZ, BOLIVIA (03/JUN/2013).- Indígenas partidarios del presidente de Bolivia, Evo Morales, quemaron este miércoles las banderas de Francia y de la Unión Europea (UE) a las puertas de la embajada francesa en la Paz, que también fue apedreada y bloqueda.
El grupo de los Ponchos Rojos, aimaras como el presidente Morales, protestaron de esa forma contra Francia, acusada por el Gobierno boliviano de haber puesto en riesgo la vida del mandatario al vetar el sobrevuelo y aterrizaje del avión presidencial en su territorio este martes.
El grupo de manifestantes retiró las banderas de las puertas de la embajada francesa, situada en la zona sur de La Paz, y les prendió fuego en medio de insultos dirigidos a varios países europeos a los que acusaron a gritos de racistas y colonialistas.
También bloquearon con losas la entrada a la legación como represalia, según dijeron los dirigentes indígenas, a que Morales también fuera bloqueado para circular por los cielos de Europa.
"Francia fuera de Bolivia", "Francia hipócrita colonialista, fuera de Bolivia" y ''Francia racista, hipócrita y fascista", "Bolivia se respeta" y "Propiedad de los Ponchos Rojos", son algunos de los carteles que pegaron en el exterior de la embajada.
Los indígenas también criticaron a Italia, España y Portugal, países a los que el Gobierno boliviano también acusó de haber puesto trabas al itinerario de vuelo de Morales.
Estos incidentes ante la legación francesa duraron unos minutos, aunque desde anoche varios los sectores sociales han protagonizado protestas, y anuncian que las movilizaciones seguirán en las próximas horas.
Un grupo policial acudió a la embajada francesa pero no pudo evitar los ataques a las instalaciones y a esta hora solo tres guardias cuidan el edificio.
Horas antes el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, anunció que los embajadores de Francia, Michel Pinard, y de Italia, Luigi De Chiara, y el cónsul de Portugal serán convocados a la Cancillería para dar explicaciones por lo sucedido anoche.
La crisis diplomática se desató a causa de sospechas de que a bordo del avión de Morales pudiera viajar el ex técnico de la CIA Edward Snowden, algo que ya fue descartado.
En las últimas horas, varios grupos sociales en Bolivia, además de los indígenas, han expresado su solidaridad con Morales y criticado a los países europeos que impidieron el tránsito de la aeronave presidencial.
Las organizaciones ofrecerán a Morales una multitudinaria bienvenida esta noche en La Paz, cuando aterrice en el país procedente desde Brasil, la última escala en un trayecto que primero le llevó desde Viena a las Islas Canarias.
Morales pasó casi 14 horas en Viena a la espera de que se aprobara una nueva ruta de retorno a su país, tras los incidentes del martes, que su Gobierno ha calificado como un secuestro y producto de la presión de Estados Unidos a varios países europeos.
El grupo de los Ponchos Rojos, aimaras como el presidente Morales, protestaron de esa forma contra Francia, acusada por el Gobierno boliviano de haber puesto en riesgo la vida del mandatario al vetar el sobrevuelo y aterrizaje del avión presidencial en su territorio este martes.
El grupo de manifestantes retiró las banderas de las puertas de la embajada francesa, situada en la zona sur de La Paz, y les prendió fuego en medio de insultos dirigidos a varios países europeos a los que acusaron a gritos de racistas y colonialistas.
También bloquearon con losas la entrada a la legación como represalia, según dijeron los dirigentes indígenas, a que Morales también fuera bloqueado para circular por los cielos de Europa.
"Francia fuera de Bolivia", "Francia hipócrita colonialista, fuera de Bolivia" y ''Francia racista, hipócrita y fascista", "Bolivia se respeta" y "Propiedad de los Ponchos Rojos", son algunos de los carteles que pegaron en el exterior de la embajada.
Los indígenas también criticaron a Italia, España y Portugal, países a los que el Gobierno boliviano también acusó de haber puesto trabas al itinerario de vuelo de Morales.
Estos incidentes ante la legación francesa duraron unos minutos, aunque desde anoche varios los sectores sociales han protagonizado protestas, y anuncian que las movilizaciones seguirán en las próximas horas.
Un grupo policial acudió a la embajada francesa pero no pudo evitar los ataques a las instalaciones y a esta hora solo tres guardias cuidan el edificio.
Horas antes el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, anunció que los embajadores de Francia, Michel Pinard, y de Italia, Luigi De Chiara, y el cónsul de Portugal serán convocados a la Cancillería para dar explicaciones por lo sucedido anoche.
La crisis diplomática se desató a causa de sospechas de que a bordo del avión de Morales pudiera viajar el ex técnico de la CIA Edward Snowden, algo que ya fue descartado.
En las últimas horas, varios grupos sociales en Bolivia, además de los indígenas, han expresado su solidaridad con Morales y criticado a los países europeos que impidieron el tránsito de la aeronave presidencial.
Las organizaciones ofrecerán a Morales una multitudinaria bienvenida esta noche en La Paz, cuando aterrice en el país procedente desde Brasil, la última escala en un trayecto que primero le llevó desde Viena a las Islas Canarias.
Morales pasó casi 14 horas en Viena a la espera de que se aprobara una nueva ruta de retorno a su país, tras los incidentes del martes, que su Gobierno ha calificado como un secuestro y producto de la presión de Estados Unidos a varios países europeos.