Internacional
Doble ataque terrorista sacude Lahore, en el Oriente de Pakistán
Al menos 45 muertos y 100 heridos dejó el atentado perpretado contra un convoay militar; nuevo desafío a las fuerzas estadounidenses
LAHORE, PAKISTÁN.- Dos atentados suicidas contra un convoy militar mataron a 45 personas en Lahore, la gran ciudad al este de Pakistán, pese a afirmaciones del Gobierno que las ofensivas han debilitado la insurgencia talibán.
Los kamikazes se acercaron caminando a los vehículos del Ejército en un barrio militar y detonaron sus explosivos a proximidad de un mercado abarrotado, en momentos en que los transeúntes acudían a la gran plegaria musulmana de los viernes.
“Hemos recuperado las cabezas de los dos kamikazes. Hubo un intervalo de 15 segundos entre las dos explosiones, su objetivo era un convoy de vehículos militares”, declaró el oficial de Policía, Chaudhry Mohamad Shafiq.
“Hubo 45 muertos y 134 heridos”, informó por su lado el jefe de la Policía de la provincia de Punyab, Tariq Saleem Dogar.
Unas horas después, cinco bombas de fabricación casera y poca potencia estallaron en el sector de Allamma Iqbal de Lahore, provocando daños menores y un movimiento de pánico, pero sin dejar víctimas.
Las autoridades pakistaníes han dicho que las ofensivas contra los combatientes han debilitado a las milicias talibán pakistaníes relacionadas con Al Qaeda que luchan para derrocar al Gobierno respaldado por Estados Unidos.
Pero los talibanes han renovado su presión sobre el impopular presidente, Asif Alí Zardari, que afronta llamamientos de la oposición de ceder sus amplios poderes al primer ministro.
Si eso no sucede, Pakistán podría afrontar una nueva crisis política mientras es presionado para derrotar a los talibanes.
Aparte de una insurgencia interna, Pakistán está bajo intensa presión estadounidense para abrir un nuevo frente y perseguir a los extremistas talibanes afganos en sus santuarios fronterizos, una decisión que recargaría a su Ejército.
Aunque las bases talibanes han sido aplastadas en las ofensivas del Gobierno en bastiones militares como Waziristán del Sur, los combatientes se caracterizan por esconderse en áreas escarpadas que son difíciles de penetrar para los militares.
Lahore, más vulnerable que Islamabad
¿Cuál es el blanco de los ataques en Pakistán?
En el último año, la relativamente tranquila Lahore, con más de siete millones de habitantes, ha sido objeto de al menos ocho potentes ataques. Entre los objetivos de la violencia terrorista ha habido oficinas de los principales servicios secretos militares y policiales, academias de cadetes y comisarías.
¿Por qué Lahore?
Fuentes de seguridad occidental aseguran que para los insurgentes, atentar en un ciudad tan poblada como Lahore sigue teniendo el mismo impacto mediático y es mucho más fácil que hacerlo en Islamabad, que desde el ataque contra el hotel Marriott (de finales de 2008) se ha blindado y es más inaccesible.
¿A quiénes se atribuye el terror?
Según las mismas fuentes, Lahore ofrece un sinfín de posibles objetivos, ya que alberga un amplio abanico de instituciones políticas, militares o civiles. La ciudad está en el corazón de la extensa y poblada provincia del Punjab, en cuyas partes más meridionales, los analistas creen que tienen su base numerosos grupos yihadistas que convergen con la insurgencia talibán.
Los kamikazes se acercaron caminando a los vehículos del Ejército en un barrio militar y detonaron sus explosivos a proximidad de un mercado abarrotado, en momentos en que los transeúntes acudían a la gran plegaria musulmana de los viernes.
“Hemos recuperado las cabezas de los dos kamikazes. Hubo un intervalo de 15 segundos entre las dos explosiones, su objetivo era un convoy de vehículos militares”, declaró el oficial de Policía, Chaudhry Mohamad Shafiq.
“Hubo 45 muertos y 134 heridos”, informó por su lado el jefe de la Policía de la provincia de Punyab, Tariq Saleem Dogar.
Unas horas después, cinco bombas de fabricación casera y poca potencia estallaron en el sector de Allamma Iqbal de Lahore, provocando daños menores y un movimiento de pánico, pero sin dejar víctimas.
Las autoridades pakistaníes han dicho que las ofensivas contra los combatientes han debilitado a las milicias talibán pakistaníes relacionadas con Al Qaeda que luchan para derrocar al Gobierno respaldado por Estados Unidos.
Pero los talibanes han renovado su presión sobre el impopular presidente, Asif Alí Zardari, que afronta llamamientos de la oposición de ceder sus amplios poderes al primer ministro.
Si eso no sucede, Pakistán podría afrontar una nueva crisis política mientras es presionado para derrotar a los talibanes.
Aparte de una insurgencia interna, Pakistán está bajo intensa presión estadounidense para abrir un nuevo frente y perseguir a los extremistas talibanes afganos en sus santuarios fronterizos, una decisión que recargaría a su Ejército.
Aunque las bases talibanes han sido aplastadas en las ofensivas del Gobierno en bastiones militares como Waziristán del Sur, los combatientes se caracterizan por esconderse en áreas escarpadas que son difíciles de penetrar para los militares.
Lahore, más vulnerable que Islamabad
¿Cuál es el blanco de los ataques en Pakistán?
En el último año, la relativamente tranquila Lahore, con más de siete millones de habitantes, ha sido objeto de al menos ocho potentes ataques. Entre los objetivos de la violencia terrorista ha habido oficinas de los principales servicios secretos militares y policiales, academias de cadetes y comisarías.
¿Por qué Lahore?
Fuentes de seguridad occidental aseguran que para los insurgentes, atentar en un ciudad tan poblada como Lahore sigue teniendo el mismo impacto mediático y es mucho más fácil que hacerlo en Islamabad, que desde el ataque contra el hotel Marriott (de finales de 2008) se ha blindado y es más inaccesible.
¿A quiénes se atribuye el terror?
Según las mismas fuentes, Lahore ofrece un sinfín de posibles objetivos, ya que alberga un amplio abanico de instituciones políticas, militares o civiles. La ciudad está en el corazón de la extensa y poblada provincia del Punjab, en cuyas partes más meridionales, los analistas creen que tienen su base numerosos grupos yihadistas que convergen con la insurgencia talibán.