Ideas
Dos leyendas cortas
Como lo prometido es deuda, para saldarla, en esta colaboración, a mis amables lectores les narraré dos bellas leyendas que quizá por ser de amor los haga olvidar la situación tan conflictiva que actualmente, es decir, en el hoy, padecemos en México. En la escala zoológica existe un animal cuyo macho, sin ser racional o cualificado como se autodenomina el hombre, la unión con su hembra no la toma tan a la ligera y prefiere ser: ¡Primero muerto que viudo! Si fuéramos capaces de entender el lenguaje de las aves, quizá eso oiríamos decir al majestuoso cóndor que habita en toda la cordillera Andina y que se sepa, en el hoy es la única ave en el mundo animal que su fidelidad a su compañera siempre lo conduce a la muerte, es la única ave que no puede acomodarse a ese nuevo destino si su compañera muere y para deleite de las personas curiosas les narraré la leyenda que en mi recorrido por la cordillera más larga del mundo escuché de los indígenas viejos cuando conviví con ellos.
La leyenda El Cóndor macho, por ser un ave monógama, cuando su hembra muere, al sentirse solo, remonta el vuelo hasta alturas inaccesibles de las altas cumbres nevadas de los picos andinos y al llegar a ellas, de pronto, intencionalmente cierra totalmente sus grandes alas y así, como un fardo inerte se precipita al vacío, para finalmente destrozarse entre los riscos de las grandes montañas, es tanto el dolor que le produce el quedarse sin su compañera, el quedarse viudo, que prefiere mejor la muerte, suicidándose así de esa manera espectacular, por eso en justicia debíamos decirle a esta ave majestuosa y valiente: “Cóndor… siempre fiel”.
La otra leyenda Los caiquenes son unas aves que viven junto a los lagos en la Patagonia sur; por su tamaño parecen patos sin tener las extremidades palmeadas, su color es pardo claro, como el cóndor, también son monógamas pero con una variante al morir la hembra el macho no se suicida, pero también se muere… de hambre ¿por qué? Los caiquenes viven en familia, la hembra cuida y alimenta a las crías cuando son pequeñas tiene que protegerlas por el ataque frecuente que sufren de los zorros grises que abundan en la zona, para una mayor protección el macho se retira a una parte más alta y vigilar que la familia no sea atacada sorpresivamente por depredadores; desde esa posición vigila pero por hacerlo no come y espera a que su compañera lo alimente, pero cuando por alguna razón la hembra muere el caiquen macho también s e muere pero no porque se suicida como el cóndor si no que se muere… de inanición ya que no está acostumbrado a buscar su comida. Pero aquí la madre naturaleza interviene con su sabiduría; la hembra al quedar viuda, ella si busca nueva pareja para que ese nuevo macho proteja a la familia pues de no hacerlo la especie se extinguiría, y aquí… colorín colorado esta leyenda se ha terminado.