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Antonio Banderas hace las paces con Almodóvar

A pesar de estar dos décadas distanciados, la relación creativa entre el actor malagueño y el director manchego sigue intacta

PARÍS, FRANCIA (15/AGO/2011).- El actor español Antonio Banderas, protagonista de la película La piel que habito, la más reciente en la filmografía de Pedro Almodóvar, señala que este filme que los ha vuelto a unir tras Átame, le supone de alguna manera el perdón del director manchego, de quien dice que consideró una “traición” su ida a Hollywood.

“Él me había creado, yo en cierto sentido era algo suyo. Vio mi partida como una traición. Ha necesitado tiempo para perdonarme”, indica en declaraciones recogidas por Le Journal du Dimanche, antes del estreno este miércoles de la película en los cines franceses.

El malagueño apuntó que aunque en estas dos décadas han hablado por teléfono y se han visto “regularmente”, sus trayectorias profesionales han estado marcadas por los desencuentros.

En 1991, cuando Almodóvar le propuso actuar en Kika, al actor le acababan de ofrecer el papel principal en la estadounidense Los reyes del mambo. Y el director no pareció aceptar de buen gusto el rechazo.

“Tuvo palabras muy duras: ‘Hollywood te va a aplastar, vas a malgastar tu talento. Y yo te lo habré advertido’”, recuerda Banderas que le dijo, y aclaró que jamás le ha guardado rencor porque “Almodóvar es un genio que ha revolucionado el cine”, al que asegura que quiere y siempre ha querido.

El reencuentro
Los dos, según el diario, tenían en mente la posibilidad de reencontrarse en un rodaje, pero a menudo había algo que se interponía en sus caminos. “En 1998, en el preestreno de La máscara del Zorro, me dijo: ‘Vas a volverte tan caro que no vamos a poder volver a trabajar juntos’. ¡Había encontrado la excusa perfecta! Pero con el tiempo uno se vuelve más razonable. Y las ganas de hacer buen cine son más fuertes que cualquier otra cosa”, recuerda el malagueño.

Con La piel que habito, finalmente, Almodóvar le ofreció un papel totalmente distinto a lo que estaba acostumbrado: “Se trata de un psicópata, pero Pedro me lo dejó claro muy rápido: ‘Nada de hacer un monstruo. No quiero algo al estilo Hollywood, esta vez vas a tener que ser sutil’. Me empujó hacia un registro que no era el mío, me hizo superar mis limitaciones, explorar mi lado oscuro. Y he salido de ello como mejor actor. Encontré la misma emoción que en nuestros primeros filmes, el mismo deseo de Pedro de sorprender, de hacer lo mejor y de manera distinta. En resumen, envejece pero no cambia”.

Almodóvar inmutable sobre todo en el set, a juzgar por sus declaraciones, en las que apunta que vio en él al mismo director “infernal” de siempre.

“Es él el psicópata”, bromea el actor, que explica que las escenas se repiten “hasta que obtiene exactamente lo que quiere. A veces te dan ganas de que se coma la cámara. Y no vale la pena intentar dar tu opinión (...). Entonces te muerdes la boca porque todo eso está al servicio de una formidable visión artística”.

Pese a todo se queda con ganas de repetir la aventura: “Le dije que me encantaría que rodáramos una comedia (...). ¿Y sabes lo que me contestó? Lo veo mal. Tengo la intención de no hacer más que thrillers’”.

Sin limitaciones
Acostumbrado a los retos

Antonio Banderas puede presumir de una carrera en ascenso que comenzó en 1982. Con 29 años de carrera, tres Globos de Oro, 25 premios más y 24 nominaciones en distintos festivales, el actor malagueño no olvida sus raíces, por ello el trabajar de nuevo con Almodóvar no significa que hacerlo con tanta experiencia sea sencillo, pues es el propio actor el que reconoce que es un reto. La ley del deseo (1987), Mujeres al borde un ataque de nervios (1988) y Átame (1990)  y ahora La piel que habito son las cintas en las que han trabajado juntos.

''(Almodóvar) Me empujó hacia un registro que no era el mío, me hizo superar mis limitaciones (…). Y he salido de ello como mejor actor'', Antonio Banderas, actor.

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