Deportes
Nuevo fraude fiscal del Barça por Neymar
La Audiencia Nacional confirma que el club catalán defraudó 9.2 millones de euros en el traspaso del brasileño
MADRID, ESPAÑA (04/JUN/2014).- La justicia española señaló que el Barcelona defraudó casi 9.2 millones de euros (12.5 millones de dólares) en la contratación del brasileño Neymar y citó a declarar al ex presidente barcelonista, Sandro Rosell, y al club como imputados por fraude fiscal.
En un auto hecho público el martes, el juez Pablo Ruz, de la Audiencia Nacional, estimó que el Barcelona cometió el presunto delito tributario entre 2011 y 2013, al no declarar debidamente el pago a sociedades vinculadas al jugador para asegurarse el fichaje.
Ruz dijo que todavía está evaluando la posible defraudación de otros 2.6 millones de euros (3.5 millones de dólares) en 2014.
El magistrado citó a declarar como imputados a Rosell y al representante del club el 13 de junio en Madrid. Rosell dimitió tras estallar el caso Neymar en enero pasado.
El club catalán pagó 13.5 millones de euros (18.3 millones de dólares) después de ser denunciado por el supuesto fraude. Pero el pago no le exime de la comisión de delito porque se abonó después de iniciarse el procedimiento judicial.
El Barça explicó que el pago de esa cantidad tiene como objetivo “dar cobertura a las eventuales interpretaciones que se puedan dar a todos los contratos firmados con motivo del fichaje del jugador Neymar”.
Ruz abrió una investigación tras la denuncia de Jordi Cases, un socio del Barcelona, al advertir irregularidades en la contratación de la estrella brasileña. En su momento, Rosell defendió la escrupulosa legalidad del fichaje y cifró el traspaso en 57.1 millones de euros.
Sin embargo, su sustituto en el cargo y actual presidente, Josep María Bartomeu, admitió después que la operación rozó los 120 millones de dólares.
Esos 9.2 millones de euros supuestamente defraudados corresponderían al 24.75% de los 37.9 millones que el Barcelona pagó a las empresas del entorno de Neymar y que la fiscalía entiende que no forman parte del traspaso sino del salario del jugador y, por lo tanto, deben ser considerados como rendimiento de trabajo.
Ruz concluye que Neymar tenía en el momento de fichar por el conjunto azulgrana la condición fiscal de “no residente”, por lo que “la obligación de tributar correspondería al pagador, el FC Barcelona, que debería practicar la retención sobre el ingreso íntegro de las retribuciones abonadas, en concreto del 24.75% de los rendimientos” del internacional brasileño.
AHÍ NO PARA
Puede ser mucho más
El Código Penal español establece una sanción de hasta seis veces la cantidad defraudada. Es decir, que si fuera condenado, el Barcelona debería pagar, además de los 9.2 millones supuestamente defraudados, una multa que podría ascender hasta los 54 millones.
En un auto hecho público el martes, el juez Pablo Ruz, de la Audiencia Nacional, estimó que el Barcelona cometió el presunto delito tributario entre 2011 y 2013, al no declarar debidamente el pago a sociedades vinculadas al jugador para asegurarse el fichaje.
Ruz dijo que todavía está evaluando la posible defraudación de otros 2.6 millones de euros (3.5 millones de dólares) en 2014.
El magistrado citó a declarar como imputados a Rosell y al representante del club el 13 de junio en Madrid. Rosell dimitió tras estallar el caso Neymar en enero pasado.
El club catalán pagó 13.5 millones de euros (18.3 millones de dólares) después de ser denunciado por el supuesto fraude. Pero el pago no le exime de la comisión de delito porque se abonó después de iniciarse el procedimiento judicial.
El Barça explicó que el pago de esa cantidad tiene como objetivo “dar cobertura a las eventuales interpretaciones que se puedan dar a todos los contratos firmados con motivo del fichaje del jugador Neymar”.
Ruz abrió una investigación tras la denuncia de Jordi Cases, un socio del Barcelona, al advertir irregularidades en la contratación de la estrella brasileña. En su momento, Rosell defendió la escrupulosa legalidad del fichaje y cifró el traspaso en 57.1 millones de euros.
Sin embargo, su sustituto en el cargo y actual presidente, Josep María Bartomeu, admitió después que la operación rozó los 120 millones de dólares.
Esos 9.2 millones de euros supuestamente defraudados corresponderían al 24.75% de los 37.9 millones que el Barcelona pagó a las empresas del entorno de Neymar y que la fiscalía entiende que no forman parte del traspaso sino del salario del jugador y, por lo tanto, deben ser considerados como rendimiento de trabajo.
Ruz concluye que Neymar tenía en el momento de fichar por el conjunto azulgrana la condición fiscal de “no residente”, por lo que “la obligación de tributar correspondería al pagador, el FC Barcelona, que debería practicar la retención sobre el ingreso íntegro de las retribuciones abonadas, en concreto del 24.75% de los rendimientos” del internacional brasileño.
AHÍ NO PARA
Puede ser mucho más
El Código Penal español establece una sanción de hasta seis veces la cantidad defraudada. Es decir, que si fuera condenado, el Barcelona debería pagar, además de los 9.2 millones supuestamente defraudados, una multa que podría ascender hasta los 54 millones.