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'Gio' tiene fe en salir del Tottenham
El atacante Giovani dos Santos tiene la esperanza de salir del club ahora que ya sólo le resta un año de contrato
CIUDAD DE MÉXICO (04/JUL/2012).- Ni siquiera la llegada del portugués André Villa-Boas hace que Giovani dos Santos sienta que los grilletes se han aflojado. El habilidoso atacante mexicano se considera preso en el Tottenham Hotspur y no hay marcha atrás en su decisión: intentará salir del club londinense a como dé lugar.
Anhela que su futuro esté en España, donde se siente cómodo. Todavía no sabe a ciencia cierta en qué club jugará, podría ser con el Málaga, el Sevilla o el Atlético de Madrid, pero está seguro de que esta vez sí saldrá de la metafórica prisión. Tiene un as bajo la manga. “Hay una cosa que juega a mi favor: me queda un año de contrato ahí [Tottenham] y me puedo ir libre”, recuerda el campeón del mundo Sub-17 en 2005, quien ya entrena con la Selección Mexicana Olímpica. “Si no es ahora, en diciembre podría irme con algún club”.
“Por lo que he visto del presidente [Daniel Levy] lo que busca es dinero y no otra cosa, no creo que me vaya a dejar ir libre”, señaló.
Dos Santos ha cumplido cuatro de los cinco años que estipula el contrato que firmó con el club inglés, cuya directiva pagó a la del Barcelona casi 14 millones de dólares por sus derechos federativos, inversión que —según el chico— ha estado entercada en recuperar, por más que haya recibido pocos minutos de juego.
“Se me hacía raro pedir tales cantidades, después de estar tres años ahí y tener poca actividad”, reconoce. “Me compraron por una y me quieren vender por el doble. Nunca supe por qué, pero eso ya es del presidente”, enfatizó.
Los reglamentos de la Federación Internacional de Futbol Asociado (FIFA) ahora están de su lado, ya que se permite a cualquier jugador arreglarse con otro club si le quedan seis meses o menos de contrato con su actual equipo. A él le agradaría marcharse cuanto antes; le ha dicho a Luis Fernando Tena que todo parece indicar que así será.
Defiende a su hermano
La negativa de Jonathan dos Santos para integrar el combinado en el que su hermano es figura, ha puesto a Gio en el ojo del huracán, aunque el chico de la enigmática sonrisa culmina cualquier suspicacia al no traicionar el llamado de la sangre.
“Hay muchos factores que no sabe la prensa. Apoyo a mi hermano, platiqué con él la decisión, sé por qué lo hizo y, en lo personal, creo que decidió lo mejor”, sentencia. “No creo que él haya pensado así [tomar revancha por los oscuros capítulos vividos en distintos tricolores”.
Anhela que su futuro esté en España, donde se siente cómodo. Todavía no sabe a ciencia cierta en qué club jugará, podría ser con el Málaga, el Sevilla o el Atlético de Madrid, pero está seguro de que esta vez sí saldrá de la metafórica prisión. Tiene un as bajo la manga. “Hay una cosa que juega a mi favor: me queda un año de contrato ahí [Tottenham] y me puedo ir libre”, recuerda el campeón del mundo Sub-17 en 2005, quien ya entrena con la Selección Mexicana Olímpica. “Si no es ahora, en diciembre podría irme con algún club”.
“Por lo que he visto del presidente [Daniel Levy] lo que busca es dinero y no otra cosa, no creo que me vaya a dejar ir libre”, señaló.
Dos Santos ha cumplido cuatro de los cinco años que estipula el contrato que firmó con el club inglés, cuya directiva pagó a la del Barcelona casi 14 millones de dólares por sus derechos federativos, inversión que —según el chico— ha estado entercada en recuperar, por más que haya recibido pocos minutos de juego.
“Se me hacía raro pedir tales cantidades, después de estar tres años ahí y tener poca actividad”, reconoce. “Me compraron por una y me quieren vender por el doble. Nunca supe por qué, pero eso ya es del presidente”, enfatizó.
Los reglamentos de la Federación Internacional de Futbol Asociado (FIFA) ahora están de su lado, ya que se permite a cualquier jugador arreglarse con otro club si le quedan seis meses o menos de contrato con su actual equipo. A él le agradaría marcharse cuanto antes; le ha dicho a Luis Fernando Tena que todo parece indicar que así será.
Defiende a su hermano
La negativa de Jonathan dos Santos para integrar el combinado en el que su hermano es figura, ha puesto a Gio en el ojo del huracán, aunque el chico de la enigmática sonrisa culmina cualquier suspicacia al no traicionar el llamado de la sangre.
“Hay muchos factores que no sabe la prensa. Apoyo a mi hermano, platiqué con él la decisión, sé por qué lo hizo y, en lo personal, creo que decidió lo mejor”, sentencia. “No creo que él haya pensado así [tomar revancha por los oscuros capítulos vividos en distintos tricolores”.