Deportes
Drogba, héroe de los Blues
El marfileño se echó a todo el Chelsea a cuestas, hizo la anotación que forzó los tiempos extra y en la tanda de penales, convirtió el decisivo
MUNICH, ALEMANIA (20/MAY/2012).- Delanteros como Didier Drogba destrozan la lógica del futbol. Si el Chelsea se pudo proclamar campeón de Europa por primera vez en su historia, nadie duda que fue gracias al marfileño, que agrandó su leyenda en la historia del club inglés.
Drogba, de 34 años, puso un broche de oro a ocho temporadas en el Chelsea, con un impresionante registro de nueve goles en nueve finales disputadas con el equipo londinense. Su continuidad es todavía una incógnita.
“De momento, ha sido el último lanzamiento de la temporada”, dijo un feliz Drogba, elegido por la UEFA jugador más valioso del partido.
“Tenemos que hablar con el club, pero no conviene tomar decisiones en momentos de fuertes emociones como éste”.
Cuando Thomas Müller adelantó al Bayern Munich a los 83 minutos, la Copa de Europa parecía sentenciada. Cualquier analista lo hubiera calificado como una victoria justa, por el control que ejerció el equipo alemán durante todo el partido.
Pero Drogba se encargó de desbaratar esa lógica. Sólo necesitó un fogonazo para dar un giro increíble a la final.
Un llanero solitario en la punta y maniatado por la férrea defensa alemana, el artillero africano emergió de la nada en el único saque de esquina del Chelsea, pateado por el español Juan Mata, y remató de cabeza al fondo de la portería de Manuel Neuer para lograr la igualada a falta de dos minutos para la conclusión del encuentro.
“Fue un partido de locos. Igualar en el último minuto de esta forma”, señaló.
Lejos de acabar con su protagonismo, Drogba apareció en tareas defensivas, lejos de su demarcación habitual, y cometió un penal claro sobre el francés Franck Ribery poco después de comenzado el alargue.
La suerte también se puso de su parte esta vez: el guardameta Petr Cech adivinó las intenciones de Arjen Robben y detuvo la pena máxima.
La final se marchó a la definición por penales, donde el destino le tenía reservado el papel protagónico.
En el quinto penal, tras el fallo de Bastian Schweinsteiger, Drogba se dirigió al punto de los 11 pasos para sentenciar el partido. En la mente de muchos, sin duda regresó como un fantasma del pasado la imagen de John Terry en 2008, resbalando ese quinto penal frente a Manchester United en la final en Moscú.
“Moscú fue muy doloroso para todos. Cuando iba a lanzar estaba confiado”, relató. “Quería convertir en sonrisas las lágrimas de hace cuatro años”. Lo consiguió.
Drogba, con sangre fría, batió a Neuer y se desplomó sobre el césped abrazado a Cech para celebrar la primera corona europea de Chelsea.
“Es un gran día para el club, para los aficionados, los jugadores”, subrayó. “Estábamos siempre cerca, siempre cerca, pero lejos al mismo tiempo”.
“Hoy tenemos la copa y es el mejor sensación”.
Se cumple un sueño de mil millones de euros
El Chelsea ha cumplido por fin el gran sueño de su propietario, el ruso Roman Abramovich, al conquistar la Liga de Campeones, en la que paradójicamente hubiera sido, en caso de derrota ante el Bayern, la peor temporada desde la llegada del magnate.
Abramovich fue saludando uno por uno a los jugadores del Chelsea mientras subían a recoger la copa. Era el objetivo hecho realidad, quizá de la manera más inesperada.
“El (Abramovich) estaba muy contento, como todos”, dijo el técnico Roberto Di Matteo.
La irrupción de Abramovich en el Chelsea en 2003 revolucionó el mercado de traspasos y algunas de las viejas tradiciones del futbol europeo. Desde entonces, es habitual ver a millonarios de los países más insospechados desembarcar en Europa con los bolsillos llenos de dólares para comprar clubes pequeños y medianos, a los que teóricamente no les une relación sentimental alguna y llevarlos a lo más alto.
Pasó con Chelsea y Manchester City en Inglaterra, que ganó su primera liga en 40 años. Ocurrió en Francia con el París Saint Germain y hasta en España con el Málaga.
Abramovich ha invertido hasta el momento mil millones de euros en decenas de fichajes, según medios especializados, y ha contratado ocho entrenadores, incluido al actual Roberto di Matteo, quien mantiene la etiqueta de interino, para crear una plantilla ganadora.
AFP/EFE/REUTERS
Supercopa
Van contra el Atlético
El Chelsea será el rival del Atlético de Madrid, que conquistó la semana pasada la Europa League, en la Supercopa europea del 31 de agosto en Mónaco. Los Blues ya han ganado la Supercopa europea, fue en 1998 al Real Madrid.
Leyendas
La alineación campeona
Petr Cech
David Luiz
Gary Cahill
Ashley Cole
Jose Bosingwa
Ryan Bertrand
(Malouda, 74’)
Frank Lampard
John Obi Mikel
Juan Mata
Salomon Kalou
(F. Torres, 84’)
Didier Drogba
DT Roberto di Matteo
FRASES
"Se ha visto el gran espíritu que tiene el equipo, nunca nos hemos rendido, hemos luchado hasta el final. Lo de hoy ha sido increíble "
Didier Drogba, delantero de Chelsea.
"El futbol es a veces loco e imprevisible. ¿Quién hubiera dicho que podíamos lograr esto hace apenas tres meses? Este final es increíble ”
Roberto di Matteo, técnico de Chelsea.
"El dueño luchó y puso mucho dinero por este triunfo. Hoy, por fin, lo hemos conseguido y gran mérito de todo lo logrado es de Robbie
(di Matteo) "
John Terry, capitán del Chelsea.
Drogba, de 34 años, puso un broche de oro a ocho temporadas en el Chelsea, con un impresionante registro de nueve goles en nueve finales disputadas con el equipo londinense. Su continuidad es todavía una incógnita.
“De momento, ha sido el último lanzamiento de la temporada”, dijo un feliz Drogba, elegido por la UEFA jugador más valioso del partido.
“Tenemos que hablar con el club, pero no conviene tomar decisiones en momentos de fuertes emociones como éste”.
Cuando Thomas Müller adelantó al Bayern Munich a los 83 minutos, la Copa de Europa parecía sentenciada. Cualquier analista lo hubiera calificado como una victoria justa, por el control que ejerció el equipo alemán durante todo el partido.
Pero Drogba se encargó de desbaratar esa lógica. Sólo necesitó un fogonazo para dar un giro increíble a la final.
Un llanero solitario en la punta y maniatado por la férrea defensa alemana, el artillero africano emergió de la nada en el único saque de esquina del Chelsea, pateado por el español Juan Mata, y remató de cabeza al fondo de la portería de Manuel Neuer para lograr la igualada a falta de dos minutos para la conclusión del encuentro.
“Fue un partido de locos. Igualar en el último minuto de esta forma”, señaló.
Lejos de acabar con su protagonismo, Drogba apareció en tareas defensivas, lejos de su demarcación habitual, y cometió un penal claro sobre el francés Franck Ribery poco después de comenzado el alargue.
La suerte también se puso de su parte esta vez: el guardameta Petr Cech adivinó las intenciones de Arjen Robben y detuvo la pena máxima.
La final se marchó a la definición por penales, donde el destino le tenía reservado el papel protagónico.
En el quinto penal, tras el fallo de Bastian Schweinsteiger, Drogba se dirigió al punto de los 11 pasos para sentenciar el partido. En la mente de muchos, sin duda regresó como un fantasma del pasado la imagen de John Terry en 2008, resbalando ese quinto penal frente a Manchester United en la final en Moscú.
“Moscú fue muy doloroso para todos. Cuando iba a lanzar estaba confiado”, relató. “Quería convertir en sonrisas las lágrimas de hace cuatro años”. Lo consiguió.
Drogba, con sangre fría, batió a Neuer y se desplomó sobre el césped abrazado a Cech para celebrar la primera corona europea de Chelsea.
“Es un gran día para el club, para los aficionados, los jugadores”, subrayó. “Estábamos siempre cerca, siempre cerca, pero lejos al mismo tiempo”.
“Hoy tenemos la copa y es el mejor sensación”.
Se cumple un sueño de mil millones de euros
El Chelsea ha cumplido por fin el gran sueño de su propietario, el ruso Roman Abramovich, al conquistar la Liga de Campeones, en la que paradójicamente hubiera sido, en caso de derrota ante el Bayern, la peor temporada desde la llegada del magnate.
Abramovich fue saludando uno por uno a los jugadores del Chelsea mientras subían a recoger la copa. Era el objetivo hecho realidad, quizá de la manera más inesperada.
“El (Abramovich) estaba muy contento, como todos”, dijo el técnico Roberto Di Matteo.
La irrupción de Abramovich en el Chelsea en 2003 revolucionó el mercado de traspasos y algunas de las viejas tradiciones del futbol europeo. Desde entonces, es habitual ver a millonarios de los países más insospechados desembarcar en Europa con los bolsillos llenos de dólares para comprar clubes pequeños y medianos, a los que teóricamente no les une relación sentimental alguna y llevarlos a lo más alto.
Pasó con Chelsea y Manchester City en Inglaterra, que ganó su primera liga en 40 años. Ocurrió en Francia con el París Saint Germain y hasta en España con el Málaga.
Abramovich ha invertido hasta el momento mil millones de euros en decenas de fichajes, según medios especializados, y ha contratado ocho entrenadores, incluido al actual Roberto di Matteo, quien mantiene la etiqueta de interino, para crear una plantilla ganadora.
AFP/EFE/REUTERS
Supercopa
Van contra el Atlético
El Chelsea será el rival del Atlético de Madrid, que conquistó la semana pasada la Europa League, en la Supercopa europea del 31 de agosto en Mónaco. Los Blues ya han ganado la Supercopa europea, fue en 1998 al Real Madrid.
Leyendas
La alineación campeona
Petr Cech
David Luiz
Gary Cahill
Ashley Cole
Jose Bosingwa
Ryan Bertrand
(Malouda, 74’)
Frank Lampard
John Obi Mikel
Juan Mata
Salomon Kalou
(F. Torres, 84’)
Didier Drogba
DT Roberto di Matteo
FRASES
"Se ha visto el gran espíritu que tiene el equipo, nunca nos hemos rendido, hemos luchado hasta el final. Lo de hoy ha sido increíble "
Didier Drogba, delantero de Chelsea.
"El futbol es a veces loco e imprevisible. ¿Quién hubiera dicho que podíamos lograr esto hace apenas tres meses? Este final es increíble ”
Roberto di Matteo, técnico de Chelsea.
"El dueño luchó y puso mucho dinero por este triunfo. Hoy, por fin, lo hemos conseguido y gran mérito de todo lo logrado es de Robbie
(di Matteo) "
John Terry, capitán del Chelsea.