Viernes, 29 de Marzo 2024

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Un regalo

Por: EL INFORMADOR

Ayer... y hoy

Quizá por ser Día del Maestro (15 de mayo) recibí un regalo, una gran satisfacción, un libro, pequeño, pues tan sólo tiene 69 páginas, pero hermosamente presentado y de un contenido humano inigualable, sentido vivencial, que da sentido a la existencia: su título: “Vivir la vida”, impreso el año pasado (2008) por “Amate Editorial”, su autora: La maestra María Luisa Sánchez de Bancalari, por desgracia ya fallecida, pero su familia decidió publicar este hermoso libro con el objeto de hacer la vida grata a los lectores y perdurar su recuerdo, entregándolo a esa casa editorial y así convertirlo también en un homenaje “post mórtem”.

En este pequeño “gran libro”, la autora evoca su vida de maestra con páginas objetivas y muchas más subjetivas con temas referentes a los seres humanos y su quehacer en la vida; son narraciones de inspiración, historias singulares, humanas, llenas de grandes bondades, lo que las convierte para quien la disfruta, en lecturas deleitosas como bien lo dijo la autora: “Este libro es un libro de historias, relatos, leyendas, cuentos y anécdotas, narraciones sencillas (pero muy humanas, diría yo) con fábulas y parábolas, porque “qué otra cosa hay más importante que vivir la vida”, y a su solitario lector le recalca: “Tu vida es lo más importante que existe, no lo olvides, pues sólo tendrás una vida y ésta no se repite, se acaba... y se acabó”, por eso lo que me quede de vida no quiero vivirlo en vano.

Al continuar deleitándome con ese pequeño libro que contiene miniepisodios, relatos cortos, sencillos, pero muy amenos, encuentro las razones que impulsaban a la maestra a llevar una vida feliz y productiva, pues tajantemente manifiesta: “Sé feliz, ningún momento de nuestra existencia debe pasarse sin una sonrisa. No es el tiempo que se vive lo que importa, 20 años los tiene cualquiera, lo difícil es tener más de 80, y si triste es llegar a viejo, más triste es no llegar. No es el tiempo que se vive, lo que importa es lo que se hace mientras se vive, lo que cuenta en el saldo final”.

La profesora Sánchez de Bancalari fue más que todo una maestra, y lo demuestra con su libro que hoy tengo en mis manos al escribir este artículo, lo que hace que la recuerde cuando la conocí hace ya muchos ayeres; fue compañera de trabajo de mi esposa en la actividad docente, en una escuela primaria urbana, y su esposo el profesor Leopoldo Bancalari (también ya fallecido) fue mi compañero cuando fui director de la Escuela Secundaria Nocturna Federal para Trabajadores No. 1, y él maestro de dibujo y modelado, y a sus familiares con las anteriores enseñanzas quiero decirles: con ella coincido plenamente, vivo la vida; soy feliz y estoy conforme con la vida, no por lo que tengo, sino por lo que hago.

ADOLFO MARTÍNEZ LÓPEZ / Escritor.

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