| “Ahorros” Por: EL INFORMADOR 11 de junio de 2008 - 23:00 hs ENTRE VERAS Y BROMAS Para decirlo pronto: tiempos hubo, relativamente recientes, en que Guadalajara merecía la etiqueta de “Casi el Paraíso”... o sin el “casi”. En uno de sus excelentes discursos, aludía monseñor José Ruiz Medrano —citado por Agustín Yáñez en “Genio y Figuras de Guadalajara”, probablemente el mejor orador sagrado de Jalisco en el Siglo XX y seguramente uno de los hombres más cultos y sensibles de estas latitudes en todos los tiempos— a la índole un tanto presuntuosa de los tapatíos. Pero decía también, en ese mismo tono presuntuoso, que había motivos sobrados para ello. (Omitiremos, por esta vez, hacer el inventario de dichos motivos, por consideración a la modestia de algún tapatío que fuera la excepción a la regla). —II— Sin embargo, los tiempos cambian... Díganlo, si no, las cotidianas lamentaciones (y las correspondientes “mentadas” a los responsables de tantas plagas como en los últimos años, de vacas a todas luces flacas, se han abatido por la otrora “Tierra de Dios y de María Santísima”) de los hijos de estos llanos tutelados —según la ampulosa leyenda inscrita en el pedestal de “La Minerva”— por los espíritus de justicia, sabiduría y fortaleza: desde la suciedad que pulula por doquier hasta el clima que se ha estropeado, pasando por las insuficiencias y deficiencias de los servicios públicos —lo calamitoso del transporte, por ejemplo—... y, en último análisis, la escandalosa mediocridad de quienes supuestamente ejercen liderazgos en los diversos ámbitos sociales. El botón de muestra más reciente: llegaron las primeras lluvias; por cuanto atenuaron las temperaturas caniculares, una bendición; por cuanto evidenciaron las imperfecciones de una obra pública (el túnel de López Mateos y Las Rosas) de la que hace poco más de un año aún hacía alarde —mediante las consabidas mantas— el Gobierno del Estado, una maldición... —III— (Al margen del diagnóstico que se haga, de la cirugía mayor a la que eventualmente deba someterse una de las obras públicas más flamantes en la zona metropolitana, ¿seguirán creyendo los administradores del erario que sus cacareados “ahorros” están mejor invertidos en la construcción del Santuario de los Mártires que en la reparación de los estropicios —como éste, sin ir más lejos— heredados de pasadas administraciones...?). Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones