Cuando se habla de la Ruta del Tequila, invariablemente como turistas solo nos imaginamos todo aquello que tiene que ver con las destilerías y el Paisaje Agavero de Jalisco, pero este circuito que comprende ocho municipios: El Arenal, Magdalena, Amatitán, Tequila, Teuchitlán, Ahualulco de Mercado, Etzatlán y San Juanito Escobedo, tiene muchos más atractivos turísticos que enriquecen la oferta cultural, gastronómica y de aventura de esta Ruta del Tequila.El pasado jueves tuvimos la oportunidad de conocer la otra cara de la Ruta de Tequila, viajando a Teuchitlán para convivir en la zona arqueológica Guachimontones y degustar una deliciosa comida en Hacienda del Carmen, una casona antigua que data desde hace 300 años. En el recorrido organizado por Thelma García Siordia, directora comercial de la Ruta del Tequila, tuvimos la oportunidad de conocer el trayecto desde una perspectiva cultural y gastronómica.“Queremos que la gente entienda la Ruta del Tequila en un concepto completo de integración, que no se vayan con la idea de que se trata nada más del tequila. Queremos integrar a los ocho municipios y darle peso a todas las partes, una es el concepto ‘Ruta cultural gastronómica’ y la otra la vamos a llamar ‘Viajando al corazón de la ruta del tequila’. Queremos que disfruten del concepto de las dos maneras”, comparte Thelma.El recorrido lo comenzamos en Guachimontones, un día después del equinoccio de primavera, ahí nos enteramos que son 10 altares circulares y cuatro canchas de juego de pelota, pero solo son dos las que están abiertas al público.Luego nos fuimos al pueblo y ahí convivimos con Berta Alicia Pérez, director de Turismo de Teuchitlán, quien nos compartió que el municipio es conocido por el consumo de ancas de rana, uno de los platillos más típicos del lugar, también que es un pueblo que vive de las remesas, de los hombres que cada semana o quince días mandan dinero desde Estados Unidos a sus familias.También es un municipio donde hay fiestas patronales durante el año y se consumen bebidas distintivas como la “Mayahuelada” (cerveza con tejuino).Llegó la hora de la comida y nos recibió en Hacienda El Carmen Hotel & Spa, Oscar Rodríguez de conserjería y promoción turística. El menú fue integrado por camarones al queso, lonja de pescado a la veracruzana y arrachera, la entrada era ceviche de jícama y pimientos y zanahorias en vinagre. La hacienda funciona como hotel desde 2001.“Tenemos diferentes nichos, nuestro principal es el hotel, el spa y el restaurante, aunque también tenemos el nicho de bodas, turismo de reuniones y turismo leisure. Las actividades que tenemos aquí son paseos a caballo, bici de montaña, campo de golf para práctica, pesca recreativa, lentes de pedal, juegos de mesa y juegos de billar”.La hacienda tiene también invernaderos y acudimos a ver el proceso de trabajo, una experiencia de contacto con la naturaleza, ya que son cultivos que van a la mesa: chiles, morrón, habanero, serrano, jalapeño, jitomate, berenjenas, fresas y lechugas.En un inicio la Ruta del Tequila fue desarrollada en sinergia con el Fondo Multilateral de Inversiones, la Fundación José Cuervo, la Secretaría de Cultura y diferentes instituciones municipales, estatales y federales. En 2009 logra el reconocimiento de Diversificación de Productos en la categoría de Rutas y Circuitos y un año después se integra al programa Rutas Turísticas de México. Desde el 2011 se formalizó La Ruta del Tequila en el Paisaje Agavero como asociación civil que busca fortalecer la identidad cultural y patrimonial a través del turismo.