Por Aurelio LópezA menos de que suceda algo inesperado y se vuelvan realidad un sin fin de variables, Ferrari cerrará el año sin conocer la victoria por segunda ocasión en tres temporadas. Desde el comienzo de 2016 fuimos testigos de un Mercedes mucho más dominante que los años previos, en 2015 los pilotos de la escudería teutona se llevaron 16 de las 19 carreras disputadas y sólo Sebastián Vettel en su monoplaza Ferrari conoció el más alto peldaño del podio.Este año comenzó sin sorpresas para las Flechas Plateadas, pero sorprendieron varios equipos detrás de ellos, unos por grandes mejorías y otros por su pérdida de ritmo, el equipo italiano desgraciadamente encaja en la segunda categoría. El año pasado aunque lejos de Mercedes tenían una gran ventaja sobre Red Bull y se veía el 2016 con mucho optimismo. Consciente que no todo es culpa de la escudería italiana por los diferentes accidentes en los que sus pilotos se han visto envueltos, repetidas penalizaciones y fallas mecánicas fuera de su control, la realidad es que Ferrari se vio superada ampliamente por el equipo austriaco, que tiene asegurado el segundo puesto en el campeonato de constructores.La crisis no sólo afecta al equipo sino también la frustración ha permeado hasta llegar al cuatro veces campeón del mundo, Sebastian Vettel. Para el alemán éste ha sido un año para el olvido y sobre la pista se comprueba la decepción e impotencia con la que carga el piloto. Vettel, que a principios de la temporada mostró tal superioridad contra Raikkonen que rondaban muchos rumores del posible retiro del finlandés. Aunque Sebastian finalizara por delante de su coequipero, este fin de semana podría ser relegado hasta la quinta posición por Max Verstappen, que viene de hacer una carrera memorable en Brasil y con su corta edad y hambre estoy seguro no hará una carrera tímida.Con la indudable codependencia entre la Fórmula Uno y Ferrari, es preocupante el estado en el cual finaliza la temporada la escudería italiana. Aunque recuerdo que a principios de los noventa una Ferrari decaída donde tuvo que llegar Michael Schumacher para levantarla y con esto reavivar la pasión de los millones de “tifosis” que existen alrededor del mundo. Espero que durante las vacaciones de invierno y con los cambios a los monoplazas, Ferrari recupere su nivel y pueda ser contendiente a victorias y campeonatos. Si Nico Rosberg no se corona este fin de semana, la escudería italiana será la única en la parrilla con dos pilotos campeones, espero que en 2017 regresen tanto el “niño maravilla” como “Iceman” con las herramientas suficientes para emocionar a una nueva generación de aficionados que no vivieron esos pasados años de gloria. Comentarios en @desdepista.
