Alternativa a los Premium

Tener un auto Premium es un sueño alimentado por muchos y es natural que así sea, puesto que su diseño, tecnología, exclusividad y potencia, nos han hecho pensar que la experiencia de conducir un vehículo de marcas de abolengo, sean estadounidenses, japonesas y principalmente europeas, es superior en todos los aspectos, principalmente en desempeño, equipo, servicios y acabados. Pero a muchos que ya hemos vivido esa experiencia, la realidad nos ha mostrado que las cosas no son exactamente así. Pagar por un auto alemán, por ejemplo, significa sufrir con la mayor devaluación en la reventa, costos mayores de seguros y mantenimiento además de, con mucha frecuencia, una injustificable menor calidad de servicio en sus distribuidores. Por esto muchos están buscando alternativas, autos que se acerquen a los Premium en aspectos como los acabados y desempeño, sin los problemas de servicio y reventa comunes a aquellos. Lo bueno es que sí hay marcas que están trabajando por llegar a este tipo de clientes. En Norteamérica, Ford es la que ha estado acercándose a este objetivo, aunque no lo declare. Los que observen más de cerca a sus vehículos se darán cuenta de que sus autos más recientes adoptan tecnologías antes sólo encontradas en coches Premium, o mejoran algunas para hacerlas más eficientes. Un ejemplo de lo primero es el SYNC 3, que ha evolucionado de una manera excelente, haciendo mucho más sencilla la tarea de interactuar con el auto. Otro son los motores EcoBoost, que han logrado reducir un problema de toda la vida de las máquinas que usan turbinas para aumentar su potencia: el “turbo lag”, o la demora para que la turbina entre en acción. La seguridad también es un tema con el que Ford se ha preocupado y si bien aún falta para llegar a lo ideal, al menos en América Latina, todos sus autos cuentan con al menos una opción con 6 bolsas de aire, en un segmento donde los demás difícilmente ofrecen más que dos bolsas.

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Francia y Japón

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Entre los europeos solía ser Volkswagen la marca que más se acercaba a los Premium, pero la política de hacer productos desarrollados de forma más específica para Norteamérica, como el Passat y la nueva Tiguan, la alejó un poco de ese mercado. El terreno quedó listo para que Peugeot lo tomara y la marca lo está haciendo.

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Desde la generación actual, productos de Peugeot como el 508, la 3008 o el 208 dan a sus clientes mejores acabados, buen equipamiento de conexión, lujo y manejo superior a la mayoría de sus rivales. Pero es en la siguiente ola de productos en la que la marca francesa realmente se luce. Vehículos como la SUV 3008 tienen nivel de acabados que solo encuentran similar en autos vendidos por marcas Premium y en algunos casos, es incluso superior a estas. Dejar un Premium y subirse a un Peugeot implicará muy poco sacrificio por parte de los clientes.

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La más reciente en adoptar este esquema, sin embargo, es la japonesa Mazda. El primer ejemplo de ello lo vimos con la espectacular CX-9, cuyos acabados, manejo y nivel de equipamiento resultan superiores a todo lo que no sea Premium. La renovación de su auto más popular en México, el Mazda3, también es un paso en esa dirección.

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Pero Mazda está yendo más allá. Porque la marca no solo se ha enfocado al producto, como Ford o Peugeot, sino también a la experiencia de compra y propiedad. Para hacerlo, está procesando un cambio en los distribuidores Mazda en todo el país, en el que el diseño de sus agencias, el confort que ofrece para los que van a comprar un nuevo auto o llevar el suyo a servicio, supera al de la mayoría de las marcas Premium. El primer punto de ventas con las nuevas características se inauguró en Monterrey, en febrero pasado. En un par de años, todas sus agencias pasarán por un proceso de remodelación para alcanzar ese mismo nivel. El que no haya manejado un Mazda últimamente debería hacerlo, para percibir que el refinamiento ya no es exclusividad de las marcas Premium.

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Todo esto es buena noticia para los que esperan más de lo que nos dan las marcas de volumen, sin el sacrificio de un precio exorbitante o de una reventa castigada. Caminamos hacia la dirección de contar con buenas alternativas a las Premium y esas tres marcas, más que nada Mazda, entendió muy bien esa necesidad de mercado.

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