Pues el presidente municipal de Guadalajara, Francisco Ayón, mostró agallas. Anoche nos llamaron a la sala de redacción de Allá en la Fuente para avisarnos que el Ayuntamiento retiraría 23 anuncios espectaculares localizados sobre la Avenida Lázaro Cárdenas, ahí donde se cometió una tala ilegal del arbolado. Los adeudos que registran los propietarios de las licencias de los anuncios fue el sustento legal para revocarles los permisos, como advirtió el Ayuntamiento. Recordemos que los tala-avenidas acabaron con 139 árboles, únicamente ahí. Y como no ha habido nadie que detenga esos atentados al medio ambiente ni encuentre a los taladores materiales e intelectuales, lo que sí está visible son los beneficiados: los dueños de espectaculares. Así que Ayón, reglamento en mano, se lanzó hasta la avenida para, in situ, dar la información y supervisar el retiro. Palomita al alcalde. Una chela por su acción. —0— Los diputados locales no dejan de sorprendernos. Hoy es el último día de 11 legisladores que se van a ir al Congreso de la Unión, y que ya fueron a reuniones preparatorias para saber cómo hacer su chamba (curso intensivo de cómo apretar el botoncito que dice a favor, en contra o abstención, por ejemplo). Mientras, ya están llegando los suplentes a tomarle medidas a sus nuevas oficinas. Dos meses de sueldo de diputado son dos meses de sueldazo, así que no hay que desaprovechar. El que ya se anotó y pidió lo manden llamar es Martín Dávalos, quien se mostró muy urgido en ocupar la curul de Enrique Aubry. Por ello envió un comunicado donde les recuerda a los actuales legisladores que él sigue en la lista de diputados plurinominales por ese partido, aunque a lo mejor no se le va a hacer. Que Aubry no le quiere dejar la curul, dicen. —0— Cuando escribimos de cómo los diputados quieren se les recuerde como alumnos aplicados que hacen la tarea, no falta quien se pregunta cómo es que en las últimas semanas, así nada más, de quién sabe dónde, sacaron tanto dictamen que estuvo en la congeladora durante años. “Pues con un horno de microondas pa descongelarlas”, respondieron Allá en la Fuente. Pues casi casi, porque resulta que muchas, pero muchas comisiones han sesionado como en hornos de microondas. Algunos diputados molestos confirmaron a esta redacción que las sesiones las hacen virtuales. —0— ¿No cree lo anterior? ¡Es en serio! Los diputados argumentan que como no les queda tiempo ni para ir a la oficina, mandan todo vía internet. O con unas cuantas llamadas telefónicas acuerdan y hacen llegar el documento para que sus integrantes lo firmen. Y tararán. Así lo hicieron con un montón de dictámenes aprobados en comisiones. Dicen los que dijeron que así salieron asuntos de las comisiones de Turismo y de Desarrollo Humano, que tiene meses sin sesionar. ¿Será?
