Porque el árbitro del partido del domingo, contra Portugal, no los escuchó —u optó por hacer como si no los escuchara—, los aficionados mexicanos que dedicaron al arquero luso, en los saques de meta, las que la FIFA ya decidió que son imprecaciones homofóbicas, creyeron que se habían salido con la suya, es probable que ahora se enteren de que no fue así: de que los “observadores antidiscriminación” capacitados por Football Against Raciscm in Europe Network (Red del Futbol Contra el Racismo en Europa), se percataron de lo ocurrido, lo reportaron a la Comisión Disciplinaria de la FIFA y consiguieron que ésta les sacara, por enésima vez, tarjeta de amonestación.Como la reglamentación contempla las multas pero no previene sanciones adicionales más drásticas, es probable que los “chistosos” insistan en su gracejada hoy que el Tri enfrente a Nueva Zelanda en la segunda jornada de la Copa Confederaciones, y que obliguen a la FIFA a apretar las clavijas, ya sea detectando a los aficionados díscolos y vetándoles el ingreso a los estadios para otros partidos de la Selección… o aplicando —ahora sí— castigos adicionales a la Federación Mexicana de Futbol.*En lo que esa incógnita se despeja, en el aspecto estrictamente futbolístico está claro que el Tri, sin menospreciar a Nueva Zelanda —su rival en la repesca que le dio el boleto para llegar “de panzazo” al Mundial de Brasil 2014—, tiene la obligación de ganar. Se trata del supuesto “pichón” del grupo, al que Rusia ya derrotó (2-0) en el partido inaugural del certamen, y que muy probablemente cumplirá, hoy ante México y después ante Portugal, el nada envidiable rol de carne para los leones.Si las sistemáticas “rotaciones” aplicadas por Juan Carlos Osorio tienden a sacar partido de las fortalezas del material humano de que dispone y a neutralizar las del adversario en turno, y si los resultados, hasta ahora, le van dando la razón, cabe suponer que la Selección Nacional hará la tarea: de entrada, ganar; después, hacerlo con la mayor amplitud posible para tener una diferencia de goles más propicia para avanzar a Semifinales… Y, si no es demasiado pedir, reducir los pintitos en el arroz —errores defensivos, falta de variantes y, sobre todo, de contundencia a la ofensiva…— que propios y extraños alcanzaron a percibir en el desempeño del Tri en el partido del domingo pasado.
