Los migrantes centroamericanos no necesariamente son devueltos a sus países hasta que llegan a la frontera Norte. De acuerdo con el Instituto Nacional de Migración (INM), en los últimos tres años fueron repatriados mil 168 desde Jalisco: uno al día, en promedio.Sólo entre enero y septiembre de este año se registró el retorno de 288 viajeros de países como Honduras, Guatemala, El Salvador, Belice y Nicaragua, aunque las cifras generales también contemplan a personas de Costa Rica y Panamá.Francisco Santana, jefe de la Academia de Relaciones Internacionales de la Universidad Panamericana (UP), afirmó que no en todos los casos hay una repatriación obligada, pues debido a que el camino es muy largo y peligroso son los mismos migrantes quienes desisten de continuar, presentándose voluntariamente ante las autoridades para solicitar un retorno asistido.“Son muy pocos los casos en los que los regresan por cometer algún delito o porque se detectó que eran migrantes”.Según la Ley de Migración y la Ley sobre Refugiados, Protección Complementaria y Asilo Político, toda persona que se encuentre bajo refugio o asilo político en México “no podrá ser devuelta al lugar que representa un peligro para su integridad física” y, por el contrario, el Gobierno deberá prestar las atenciones que garanticen el respeto a sus derechos humanos.Pero si esas condiciones no se cumplen, deberán ser devueltos a sus países.El coordinador de FM4 Paso Libre, Mauricio Pineda, añadió que otra causa de repatriación que se registra en menor medida es la revisión en operativos montados por autoridades migratorias. La crisis migratoria y humanitaria que recientemente ha acaparado la atención de la opinión pública no distingue edades. En Jalisco, por ejemplo, 117 menores centroamericanos fueron presentados entre enero y septiembre de este año ante el Instituto Nacional de Migración (INM), pero 31 de ellos viajaban solos y dos tenían menos de 11 años.De acuerdo con el director de Atención y Protección de la Procuraduría de Niñas, Niños y Adolescentes del DIF Jalisco, Javier García, entre 2016 y 2018 sólo han sido recibidos 47 menores de edad por esa dependencia para darles apoyo, protección y orientación para continuar su camino. El resto fue detectado por otra instancia o directamente por la delegación Jalisco del INM.Explicó que algunas razones que escucharon de los menores para justificar su largo viaje por México fue que habían abandonado su hogar para aspirar a una mejor vida, porque los padres los enviaron con la promesa de que los alcanzarían en el camino e incluso registraron un caso en el que los padres del menor viajero habían sido asesinados en su país de origen, por lo que se decidió a emprender su propio camino. “Nos dijo que no tenía ya nada que perder”.Dentro de los apoyos que otorga la institución se encuentran la orientación jurídica y el resguardo durante su estancia en la Entidad. Por su parte, Francisco Santana, jefe de la Academia de Relaciones Internacionales de la Universidad Panamericana (UP), detalló que es cada vez más común ver a jóvenes menores de edad que viajan solos por México.Esto, añadió, corresponde principalmente a problemas sociales que enfrentan en los países centroamericanos como las pandillas, quienes además de cobrarles derecho de piso los amenazan para que se les unan, pues de lo contrario “matarán a sus familias”. Es por ello que los propios padres deciden mandarlos al extranjero.De acuerdo con Mauricio Pineda, el coordinador general de la asociación FM4 (encargada de apoyar a las personas migrantes en tránsito), los jóvenes que principalmente han detectado recorren Jalisco rumbo a la frontera Norte, pero no lo hacen completamente solos, sino con otros jóvenes de edades similares.Tras la primera caravana que llegó a Jalisco el pasado 10 de noviembre, ninguno de los más de siete mil 200 migrantes que han pasado por el Estado inició trámites para permanecer aquí, confirmó la directora del Instituto Jalisciense para los Migrantes, Mariana Márquez Laureano.“Se les ofreció toda la información sobre el tema, pero sólo 10 personas pidieron informes, aunque solamente quedaron en eso; no iniciaron ningún proceso o un trámite a pesar de los beneficios que se les decían que podían llegar a tener”, expresó.Uno de los beneficios que pueden obtener tras iniciar sus trámites de refugio es la obtención de una Clave Única de Registro Poblacional (CURP), con la que pueden comenzar a tramitar otro tipo de documentos como una licencia de conducir, misma que funciona como una identificación oficial mexicana con la que pueden empezar a solicitar empleo.“Iba a iniciarse una feria del empleo para las personas que están en solicitud de refugio y ya pueden obtener algún empleo temporal en lo que se regularizan totalmente”.El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó ayer por la tarde que los migrantes que deseen solicitar asilo en ese país permanecerán en México en tanto sus procesos queden resueltos. Ayer, el diario The Washington Post publicó que había un principio de acuerdo para que así ocurriera, y que éste tenía el aval de Andrés Manuel López Obrador, el próximo jefe del Ejecutivo.No obstante, Olga Sánchez Cordero, designada por el Presidente electo para ser titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), desmintió el supuesto acuerdo. “El futuro Gobierno no considera en sus planes que México asuma la condición de `tercer país seguro´ para la atención de los migrantes centroamericanos, o de otros países, que se encuentran en territorio de México, o para los que lo hagan en el futuro”, precisó la oficina de prensa de la actual senadora.El diario estadounidense citó a Sánchez Cordero en declaraciones sobre el programa “Quédate en México”, que significaría “una solución de corto plazo”.“La solución de mediano y largo plazo es que la gente no migre. México tiene los brazos abiertos y todo, pero imagina: una caravana después de otra, eso también sería un problema para nosotros”, habría dicho Sánchez Cordero al Washington Post.La próxima secretaria de Estado sentenció que “no existe acuerdo de ningún tipo entre el futuro Gobierno federal de México y el de Estados Unidos”.A través de un desplegado, Sánchez Cordero puntualizó que el Gobierno en transición sólo mantiene coordinación con la administración que aún encabeza Enrique Peña Nieto respecto al tema de los migrantes, y todo su interés está en que se respeten sus derechos humanos.Asilo: Es la Protección que el Estado Mexicano otorga a un extranjero considerado “perseguido” por motivos o delitos de carácter político y cuya vida, libertad o seguridad se encuentran en peligro.Refugio: Apoyo de México a quienes temen ser víctimas de persecución por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un determinado grupo social u opiniones políticas.Aún con su permanente discurso nacionalista, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, registra una baja notable en la cantidad de deportados mexicanos, con respecto a las cifras heredadas por su predecesor, Barack Obama.El pasado 19 de mayo, este medio publicó que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos deportó a poco más de 124 mil mexicanos en 2017: la menor cifra anual de repatriaciones de ciudadanos de México en la última década.Hace cinco años se registró la cifra récord en deportaciones en la historia de Estados Unidos, cuando el ICE repatrió a 407 mil personas, de las cuales poco más de 288 mil eran ciudadanos mexicanos.En 2017 fueron deportados 124 mil 807 mexicanos; un año atrás fueron cerca de 150 mil. En 2008, poco más de 254 mil migrantes indocumentados originarios de México fueron enviados a su país.